La colisión se produjo de madrugada, cuando uno de los trenes estaba estacionado junto a un pequeño andén a las afueras de la ciudad, indicó Nasir Nazeer, funcionario ferroviario de Karachi.
Es probable que el conductor del segundo tren, que embistió contra el primero, ignorase una señal de tráfico ferroviario y causara el accidente, indicó. Había una investigación en curso, añadió.
Entre los muertos había tres mujeres y dos niños, dijo la doctora Seeme Jamali en el hospital Jinnah de Karachi, donde se trasladó a la mayor parte de los heridos. Cinco de los heridos se encontraban en estado crítico y estaban siendo operados por lesiones en la cabeza, añadió.
En el lugar del siniestro quedaron varios vagones rotos y retorcidos, muchos volteados sobre el lado en una amplia zona. Policía y rescatistas exploraban los restos, buscando más víctimas del accidente.
Se temía que la cifra de víctimas pudiera subir porque hubiera cuerpos atrapados en algunos de los vagones, indicó el policía Mukhtar Shah.
“Oímos gritos, gente pidiendo ayuda desde los restos”, dijo Shah.
Algunos familiares buscaban ansiosos a sus seres queridos en el hospital. “No puedo encontrar a mi esposo”, dijo una mujer en imágenes emitidas en vivo por una televisora local desde el hospital.
Pakistán tiene una de las peores redes ferroviarias del mundo, que a menudo sufre accidentes mortales.
El ministro paquistaní de Ferrocarriles, Saad Rafique, ordenó una investigación. El primer ministro, Nawaz Sharif, presentó sus condolencias a las víctimas y ordenó a las autoridades locales que proporcionaran toda la asistencia posible a las familias.