Mayra Escobar preside la Asociación Comunitaria Mujeres en Acción de María.
Unas 200 personas de la tercera edad de escasos recursos, residentes de Ciudad Peronia, zona 8 de Villa Nueva, son atendidas por la Asociación Comunitaria Mujeres en Acción de María.
Su presidenta es Mayra Escobar, quien hace labor social desde hace 10 años. “Me dedico a esto porque el mandato de Dios es amar y ayudar al prójimo”, expresa. “Los ancianos están desprotegidos; muchos piden limosna en la calle o sus familiares los abandonan. Nosotros tratamos de darles lo que necesitan”, agrega.
Ahí, a través de la Orden de Malta y donaciones de gente de buen corazón, se les brindan medicamentos y víveres una vez al mes. Asimismo, se les beneficia con sillas de ruedas, andadores o bastones.
“Quien desee ayudar a un abuelito de los que atendemos, lo puede hacer”, refiere Escobar. “Asimismo, aceptamos donaciones, pero no de dinero, porque así no hay malos entendidos. Preferimos que la colaboración sea directamente con ellos”.
También se organizan talleres de manualidades. Muchos de ellos crean llamativos productos, como floreros, cofres, cuadros, tejas, cojines o sobrefundas, y luego las venden para obtener más recursos.
Un ángel
Los abuelitos se reúnen en la sede de la asociación los miércoles y jueves. Muchos son muy sonrientes y conversadores. “Ella (Escobar) es nuestro ángel, no sabríamos qué hacer sin su bondad”, dice una de las beneficiadas, visiblemente conmovida. Otra comenta, con los ojos llorosos: “La queremos mucho, porque siempre está pendiente de nosotros”.
Escobar observa a lo lejos y también se limpia las lágrimas. “Yo también los amo”.
En la Asociación Comunitaria Mujeres en Acción de María también colaboran Judith Recinos, Margarita Ruiz, Silvia Sánchez, Betty Sáenz, María Ochoa y Zaida Rosales.