Uno de ellos es la casa patronal de la finca de café Candelaria Xolhuitz, ubicada en Nuevo San Carlos, Retalhuleu, una construcción de dos niveles, con vista al mar, que data de finales del siglo XIX y convertida en hotel por la cooperativa de agricultores del lugar.
Al finalizar el siglo XIX Guatemala producía un tercio de su café en fincas de propietarios alemanes y exportaba dos tercios de su producción del aromático hacia el país europeo. Unas 200 fincas del país pertenecían a alemanes. Candelaria Xolohuitz era una de las 14 consideradas “grandes” en la “costa cuca”.
Los primeros propietarios de la finca en mención, en 1875, fueron Francisco Sánchez e hijos, quienes la registraron en 1877. En 1890 se traspasó el terreno a Enrique Neutze, y dos años más tarde, a Adolfo Meyer, quien continuaba siendo su dueño en 1911.
Soto cuenta que según relatos locales, en el sitio donde se molía el café falleció de manera trágica la pequeña hija de los propietarios, de origen alemán, mientras jugaba con una de las máquinas.
En ese lugar fue donde registró la mayor actividad de campos electromagnéticos y a donde huéspedes y trabajadores se rehúsan ingresar. Algunos dicen haber visto a un hombre de estatura baja con sombrero.
Al revisar las grabaciones, los investigadores indican que sus cámaras infrarrojas captaron el paso de una sombra frente a ellos, además, aseguran haber escuchado pasos y el movimiento de un pequeño vagón sobre los rieles, en el segundo piso, cuando solo el equipo de cuatro personas se encontraba en el nivel inferior y en todo el sector.
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En su canal de YouTube —Guatespantos, con casi 80 mil suscriptores— se pueden ver más de 200 videos de visitas a lugares donde personas hacen referencia a fenómenos sobrenaturales que se conocen como fantasmas o aparecidos, y que pueden manifestarse a cualquier hora.
Vea el video de esta investigación.
En zona 10
Esta es la conocida residencia abandonada donde se filmó la película Exorcismo documentado (2012), basada en testimonios de una posesión demoniaca. El equipo de producción ha asegurado que observó manifestaciones paranormales durante la grabación. Soto indica que se desconoce el origen de la casa y de las personas que la habitaron, pero se cree que perteneció a una familia adinerada. En el siglo XVIII, esta área de la zona 10 era parte de la hacienda La Culebra y se estableció el 1 de enero de 1877 como inicio de sus actividades.
En el lugar se erigieron residencias de familias con poder político y económico. El equipo de Guatespantos asevera haber experimentado sensaciones extrañas e incómodas en la residencia, entre otras, una energía oscura, a tal punto que al final de la investigación surgieron desavenencias entre ellos. En las gradas captaron con sus aparatos una figura. Agregan que apareció la marca de una mano extraña en uno de los escalones, cuando solo ellos se encontraban, que vieron sombras y escucharon voces. El ambiente se sintió pesado y frío, en especial en el segundo piso. Soto durmió solo afuera de la casa, dentro del automóvil, pues ya no tuvo ánimos de hacerlo adentro. Tuvo pesadillas toda la noche y cuenta que le tocaron el vidrio trasero tres veces.
Enlace del video de la investigación.
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En Kaminaljuyú
El nombre del centro poblacional prehispánico de Kaminaljuyú significa “cerro de los muertos”, que se extendía por todo el Valle de la Ermita y fuera de ella, sobre cuyos montículos se erigió la Nueva Guatemala de la Asunción. En una casa de la colonia del mismo nombre, zona 7, que era ocupada para oficinas, se reportaron sucesos sobrenaturales y los empleados evitaban permanecer en el lugar.
Cuando Guatespantos fue a investigar la residencia, no había corriente eléctrica. Buscaron la explicación lógica de una puerta que se abrió sola, pero no la encontraron. Dicen que escucharon cuando el picaporte se movió solo. Soto cuenta que en la casa reina una oscuridad profunda, pese a que había luz en la calle. No podían ni verse las manos. Relatan que percibieron cambios bruscos de temperatura y olores fuertes. Una de las integrantes del equipo sintió que la tocaron y Soto pensó que ella lo iba a atacar. Al ver la grabación, captaron una sombra que se avalanzaba hacia él. Según dicen, las energías negativas eran muy intensas.
Enlace del video de la investigación.
En zona 2
En 1919 se erigieron en los ejidos de Jocotenango, actual zona 2, varios chalés de materiales prefabricados, de elevado precio. En 1926 el área era considerada una de las más exclusivas de la ciudad por sus jardines, bosquecillos y cómodas residencias. Una de ellas albergaba un colegio hasta hace poco, donde parecen haberse manifestado sucesos sobrenaturales. En el primer nivel había un espacio que las personas utilizaban como bodega y donde el personal educativo se negaba a ingresar.
El equipo de Guatespantos dice haber detectado voces de niños y otro tipo de actividad paranormal en todo el colegio, en especial en la antigua bodega, donde se registró alta intensidad de campos electromagnéticos. En la caseta que era utilizada para vender comida a los alumnos se había reportado la presencia de un niño. Añaden que las cámaras de Guatespantos captaron el ente de un niño, cuya figura era morada, lo cual indica que tenía baja temperatura. Los seres vivos, dicen, se captan de color amarillo. Soto comenta que es una de las raras ocasiones en las que han detectado alguna presencia con este equipo.
Enlace del video de la investigación.
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En Quetzaltenango
Ubicada en la zona 1 de la ciudad altense, esta residencia destaca por su particular torreta de piedra, donde José, uno de sus antiguos habitantes, a quien le gustaba beber y fumar, se suicidó, según cuentan, tras haberse enamorado del espíritu de una bella mujer.
Inexplicables actividades sobrenaturales dicen haber experimentado las personas que estuvieron en la casa que fue el hogar, en sus inicios, de un ingeniero ferroviario alemán, quien la construyó hace más de cien años. En el jardín hay dos tumbas, que se cree eran de familiares del propietario.
En los últimos años se convirtió en un café, donde las personas que llegaban tenían la sensación de que alguien tocaba su cabello. Se cree que es José quien deambula por la casa. Guatespantos quería comprobar la presencia de José, así que en la torreta, donde él dormía, colocaron aparatos para captar algún tipo de manifestación. En ese momento, cerca de la cama, el dispositivo detectó una figura. ¿Sería José?
Enlace del video de la investigación.
En Cruz Roja Guatemalteca
En este sitio, ubicado en la 8a. avenida y 3a. calle de la zona 1, se ubicaba el convento de Santa Teresa, solar que fue adjudicado a las monjas de esta orden en 1779. La iglesia y el convento provisional se comenzó a construir en 1816 y quedaron concluidos un año más tarde. En 1872, durante la expropiación de bienes de la Iglesia, a cargo del gobierno liberal, en sus instalaciones funcionó la cárcel de mujeres Santa Teresa. En la década de 1980 se empleó el lugar para el Cuerpo de Detectives, y en 1981 fue cedido a la Cruz Roja Guatemalteca.
La primera vez que Guatespantos fue a investigar el lugar, hace unos siete años, Soto dice haber visto un rostro blanco en las antiguas carceletas, parecido a un mimo, con las cuencas de los ojos negros. Con una radio AM/FM, que le llaman “spirit box”, usada para captar voces del más allá, cuentan que escucharon una voz que les decía “salgan”. Otra persona que los acompañó en esa ocasión también indicó haber visto el rostro en uno de los baños, una experiencia que le resultó perturbadora y tuvo que ser tranquilizado por Soto.
Otro de sus dispositivos captó una figura humana en la carceleta donde vio el rostro blanco, y el equipo escuchó voces de niños. El nivel más activo de los campos electromagnéticos se registró en el tercer nivel, donde estaban las salas de cirugía y las carceletas.
Enlace del video de la investigación.
Mansión Guirola
Aunque no se encuentra en Guatemala, sino en Santa Tecla, El Salvador, esta residencia encierra muchos secretos vinculados con la intensa actividad paranormal registrada en ella por Guatespantos. La familia Guirola fue una de las más prominentes y acaudaladas de ese país en el siglo XIX y parte del XX, dedicada a negocios exitosos como el cultivo de café, por lo que construyó varios inmuebles. De ahí que surgió la creencia local de que tenían pactos con el diablo para hacerse de más riqueza, la cual ha sido rotundamente negada por una de sus descendientes, Violetta Dubois Guirola.
Una de las propiedades más representativas de la familia es Villa Santa Tecla, que, por su estilo neoclásico, pudo haber sido construida entre 1920 y 1925. En la actualidad pertenece a otra familia, pero está deshabitada desde el 2004. La casa se conecta por túneles subterráneos con otras propiedades de la familia Guirola, por lo que se piensa que la familia se movilizaba por ellos. Durante la investigación de Guatespantos el guardián les contó que en la habitación donde duerme ha sentido que le mueven la cama. También dijo haber escuchado que se caen objetos. La manifestación más impactante fue cuando Soto y otra investigadora dicen haber visto una esfera de luz con una especie de tentáculos que se movía hacía abajo hasta que desapareció. Otro integrante del equipo sintió que lo empujaron. Luego de esta experiencia quedaron tan afectados que no pudieron continuar con la investigación.
Enlace del video de la investigación.
Fuentes históricas consultadas: Por los senderos de la Nueva Guatemala de la Asunción (2012) y Crónicas de Asunción: datos para la historia de la ciudad de Guatemala (2016), de Aníbal Chajón; Arquitectura de las fincas cafetaleras de la “costa cuca”, segunda mitad del siglo XIX, tesis doctoral de Javier Quiñónez (2017); http://bch.muniguate.com/ y elsalvador.com