Arévalo nació en Taxisco, Santa Rosa, el 10 de septiembre de 1904, hijo de Mariano Arévalo Bonilla y Elena Bermejo de Paz. Estudió magisterio en la Escuela Normal Central para Varones y ya en 1923 era docente allí mismo. Ganó una beca impulsada por el gobierno de Lázaro Chacón para enviar a profesores destacados a estudiar al extranjero. Juan José fue a Argentina. Chacón murió y el presidente Ubico no dio continuidad a sus iniciativas de transformación educativa. Recortó las pensiones a los estudiantes becados. Arévalo regresó a Guatemala.
El régimen dictatorial le causó fuerte descontento y tuvo que irse al exilio, de vuelta a Argentina. En 1934 se doctoró en Filosofía y Ciencias de la Educación en la Universidad Nacional de La Plata. Trabajaba como docente universitario cuando cae Ubico el 1 de julio de 1944 y lo llaman para ser candidato presidencial. Un mes y medio después de su retorno a Guatemala, el 18 de octubre, Arévalo teme por su vida a causa de la represión gubernamental y se refugia en la embajada de México.
El 20 de octubre cae Ponce y queda un triunvirato en el gobierno. Las elecciones programadas para el 17, 18 y 19 de diciembre de 1945 siguieron en pie, a pesar de la oposición del triunviro Francisco Javier Arana, quien propuso suspenderlas.
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Arévalo ganó por abrumadura mayoría de 255 mil 260 votos. Más del 75 por ciento. Adrián Recinos tuvo 20 mil 749 votos; Manuel María Herrera, 11 mil 62 votos y Guillermo flores Avendaño, 8 mil 230.
Asume gobierno electo
El 15 de marzo de 1945 quedó disuelta la Asamblea que redactó la nueva Constitución, que sustituía a la de 1879. Ese mismo día cobró vigencia la nueva Carta Magna y Arévalo recibió la banda presidencial. Tenía intenciones democráticas, pero en varias ocasiones suspendió garantías constitucionales a causa de amenazas de golpes de Estado. Designó como Jefe de las Fuerzas Armadas a Francisco Javier Arana y a Jacobo Árbenz como ministro de Defensa.
La autonomía municipal establecida en la Constitución sustituyó el régimen de intendencias impuesto por el dictador Ubico. Además se estableció la autonomía de la Universidad de San Carlos. Se permitió la libre organización de trabajadores, se creó el Instituto Guatemalteco de Seguridad Social, se decretó el Código de Trabajo y se permitió el libre funcionamiento de nuevos partidos políticos.
Sectores opositores calificaron de “comunistas” varios de los cambios impulsados por Arévalo, por no convenir a sus intereses. Sin embargo, este nunca aceptó ni avaló tal ideología. Por el contrario siempre condenó las acciones antidemocráticas del bloque soviético. La jerarquía católica conservadora, presidida por el Arzobispo Mariano Rossell Arellano no disimuló su descontento. Así también, “Tampoco disimuló su hostilidad el gobierno estadounidense, cuya incomprensión del fenómeno asombra aún más después de los años”, expone la Historia General de Guatemala. El embajador Patterson fue disimuladamente hostil.
Impulso educativo
Dentro de las políticas impulsadas por el gobierno de Arévalo estuvo la mejora educativa mediante la creación de las llamadas Escuelas tipo Federación, cuyo diseño arquitectónico integraba la actividad de aprendizaje teórico y práctico; así también se apoyó a jóvenes artistas para que pudieran obtener becas para estudiar en el extranjero.
Se creó el Instituto de Antropología e Historia para el cuidado del patrimonio colonial y prehispánico; se instituyeron la Orquesta Sinfónica Nacional y la Dirección General de Bellas Artes. Se creó la Escuela Normal Rural Pedro Molina, se crearon escuelas primarias nocturnas, se otorgó autonomía al deporte y se emprendió el proyecto de la Ciudad Olímpica. Los precios del café favorecieron el desarrollo de las iniciativas arevalistas puesto que se habían recuperado notablemente.
A pesar de todas las dificultades y sublevaciones, Arévalo consiguió concluir su período y entregó la presidencia al presidente electo, el coronel Jacobo Árbenz Guzmán el 15 de marzo de 1951. Se radicó en Chile y Venezuela. En 1963 fue nuevamente proclamado candidato presidencial para las elecciones de noviembre, pero su entrada al país estaba vetada. Aún así llegó el 29 de marzo.
En Prensa Libre se publicó una histórica entrevista de Isidoro Zarco Alfasa, en la cual Arévalo exponía su interés por conducir un gobierno democrático. El 1 de abril se produce el golpe de Estado del coronel Enrique Peralta Azurdia, se deroga la constitución y las elecciones se suspenden. Arévalo murió en 1990. Está sepultado en su natal Taxisco.
Entrevista histórica
Isidoro Zarco, uno de los fundadores de Prensa Libre, entrevistó al expresidente Juan José Arévalo, cuya presencia en el país fue ilegalmente prohibida por el gobierno de Miguel Ydígoras, en 1963. Por esta causa tuvo que entrar al país, a escondidas, por la frontera de El Salvador el 29 de marzo. Arévalo se perfilaba como fuerte candidato para las elecciones de noviembre “Nunca he sido comunista, no me gusta el comunismo, ni jamás seré comunista”, declaró Arévalo. “Si el pueblo me elige, todos los excandidatos vivirán en su patria sin molestias”, añadió el exmandatario. Un día después de publicada la entrevista se produjo un golpe de Estado y se suspendió la elección.
Con información de Historia General de Guatemala.
SERIE HISTÓRICA (78)