Revista D

40 años sin Siqueiros

La obra de David Alfaro Siqueiros sigue brillando cuatro décadas después de su muerte.

El mural de Siqueiros La Marcha de la Humanidad relata la historia del pueblo mexicano.<br _mce_bogus="1"/>

El mural de Siqueiros La Marcha de la Humanidad relata la historia del pueblo mexicano.

El muralismo en México no solo representó una expresión artística, sino una falange de la Revolución de 1910 y el idealismo sociopolítico. Entre sus máximos representantes se encuentra David Alfaro Siqueiros (1896-1974), quien con gran fuerza ideológica y pictórica utilizó arte para aleccionar a las masas mestizas e indígenas.

Siqueiros se involucró desde adolescente en las causas sociales. A los 18 años se enlistó en el Ejército Constitucionalista liderado por Venustiano Carranza. Fue en 1937 cuando viajó a España, donde combatió junto al Ejército Republicano contra Francisco Franco. En 1967 recibió el Premio Lenin de la Paz y donó los 25 mil rubros obtenidos a la República de Vietnam, que en aquel tiempo combatía a las fuerzas de Estados Unidos.

Vivió en Cuba, Estados Unidos, Chile y Argentina, debido a transitorios exilios que se vio obligado a imponerse por la persecución política que sufrió en México, razón por la que su obra no se concentra solo en el país azteca.

Era escultor y pintor, pero debido a su ideología rechazó la obra de caballete y optó por los murales; además, promovió el uso de nuevas tecnologías en aquel tiempo como las pinturas industriales, la sustitución de bocetos por fotografías, la implementación del cinematógrafo para proyectar las imágenes y el aerógrafo o brocha de aire en lugar del pincel.

 Su legado

Dictó su testamento a 25 días de su muerte. Heredó su colección personal y varias propiedades al pueblo de México, para que fueran centros de análisis y experimentación artística.

En la colonia Polanco, de la Ciudad de México, se encuentra la Sala de Arte Público Siqueiros. Esta fue una de sus casas. Actualmente es un museo que brinda visitas guiadas, conferencias y material de consulta. Está a cargo del Instituto de Bellas Artes y en el 2010 fue objeto de una remodelación. Se restauraron los murales y se digitalizaron más de 80 mil documentos, fotografías y materiales de archivo. También se modernizó la fachada y se creó un mejor acceso y espacio para una librería.

La Tallera, ubicada en Cuernavaca, fue el primer taller muralista de México, fundado en 1965. El edificio, que también fue residencia del artista por 10 años, se construyó con intención didáctica. Sus instalaciones mecánicas son capaces de mover grandes paneles hacia un foso donde maestros y aprendices pueden trabajar sin necesidad de andamios. Esta fue remodelada y reinaugurada en el 2012; sin embargo, los descendientes del artista y más asiduos seguidores critican su uso elitista y no para el público, como Siqueiros deseaba.

El Poliforo Cultural Siqueiros (Polyforum Siqueiros) en el Word Trade Center de México, es una edificación única y multifuncional. La nave principal, llamada Foro Universal, alberga el mural más grande del mundo, La Marcha de la Humanidad. Impacta no solo por su tamaño sino por las representaciones que provocan en el espectador la preocupación por el futuro. El Teatro Polyforum es utilizado para conferencias.

En el exterior, su fachada en forma de dodecaedro se compone de 12 paneles con un tema distinto en cada uno. Al aire libre se encuentran los rostros de los muralistas más destacados de México, entre los cuales Siqueiros se representó a sí mismo como Prometeo encadenado. El edificio es privado y fue construido bajo el auspicio de un mecenas.

El Museo del Bicentenario fue inaugurado en el 2011, en Argentina. Su colección incluye el único mural de Siqueiros que no tiene tema social. El Ejercicio Plástico fue originalmente pintado en 1933, en el sótano de la finca Los Granados, ubicada en Don Torcuato, Provincia de Buenos Aires. En 1990 la obra fue restaurada y extraída de su lugar con la intención de llevarla de gira por el mundo, pero un litigio entre varias empresas que reclamaban su propiedad la mantuvo guardada en un contenedor por 16 años, hasta el 2003, cuando la obra fue declarada Bien de Interés Histórico Artístico Nacional por el gobierno de Néstor Kirchner y trasladada a la Casa Rosada primero, y luego al museo. El propósito de Siqueiros y sus colaboradores fue hacer sentir al espectador que se encontraba en una caja de cristal y que las figuras nadaban a su alrededor.

Muerte al invasor es un mural pintado por Siqueiros en la Escuela México situada en la población de Chillán, Chile, en 1942. Luego de que fue acusado de intento de asesinato contra León Trotsky, quien por ese tiempo se refugiaba en México, Pablo Neruda invitó al muralista a trabajar en Chile mientras las aguas se calmaban. El terremoto que afectó a Chile en el 2010 causó daños y rajaduras al mural que había sido restaurado en el 2008, pues en el 2004 pasó a formar parte de los monumentos históricos nacionales del país del sur. Este fue restaurado por un equipo dirigido por especialistas mexicanos en marzo del 2010.

La Calle Olvera de El Pueblo de Los Ángeles Historic Monument es el sitio donde se yergue el mural América Tropical, pintado por Siqueiros en 1939. Esta polémica obra fue censurada y cubierta con una capa de pintura blanca casi de inmediato, luego de su develación.

El mural presenta a un Cristo con rasgos indígenas que el artista pintó inspirado en la fotografía Japanese Crucifixion, de Felice Beato. En el 2012, autoridades de la ciudad y del Instituto de Conservación Getty inauguraron el mural restaurado y también el Centro de Interpretación de América Tropical, que cuenta con imágenes la historia del mismo.

Retrato actual de México (1932) es el segundo de los tres murales que Siqueiros pintó en Estados Unidos, y es el que se conserva mejor, pues Mitin Obrero se deterioró hasta su desaparición. En el 2001, el retrato fue donado por la familia del cineasta Dudley Murphy al Museo de Arte de Santa Bárbara. Un equipo multidisciplinario se dedicó a proteger el mural para su traslado desde su lugar de origen, en Pacific Palisades, Los Ángeles, y restaurado totalmente. En el 2002 fue presentado al público. Este relata las condiciones sociales de México en la década de 1930 y la relación de este país con Estados Unidos.

 

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