HACIA ADELANTE

Viviendo lo increíble

Jaime Francisco Arimany

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Los guatemaltecos estamos viviendo una situación caótica en el ámbito político, por lo cual se descalabra todo el resto de los sistemas: el legal, el económico y el financiero, reflejándose en las principales actividades de gobierno: el judicial, el de salubridad, el educativo y el de obras estatales.

El problema de gobernabilidad cuando se han perdido los valores necesarios para dirigir el país se origina porque se cambian los objetivos de un gobierno sano y se adquiere cada vez una mayor ambición de gobernar para obtener más poder y riqueza, sin importar que la mayoría de la población viva en una pobreza tal que el mandamiento que dice amarás a tu prójimo como a ti mismo no existe. Amón se apodera del pensamiento y sentimientos de los enriquecidos ilícitamente, creándose un efecto adictivo semejante al que producen el alcohol y las drogas, ya que quienes se vuelven adictos, con el paso del tiempo quieren ingerir más y, por lo tanto, cada vez están en una situación peor.

Aquellos que están en esa situación de riqueza y de poder se creen más listos y capaces que los demás, por lo cual ven con menosprecio a quienes creemos y luchamos por un país donde se erradique la pobreza extrema y la miseria, para vivir en una nación cuyo sistema sea ejemplar para el mundo.

La falsa superioridad basada en la riqueza se refleja en la exhibición pública que hacen con los bienes adquiridos con fondos obtenidos corruptamente, pensando que los ciudadanos que los conocieron antes de tener una función pública, deslumbrados por una riqueza que ha sido adquirida en sus orígenes o en su presente de forma ilegal, se olvidan de donde la obtuvieron.

Es cierto, muchos se doblegan y únicamente ven la situación económica actual, llegando inclusive a tomar acciones humillantes para quedar bien y lograr algún beneficio.

Cuando el efecto se refleja en toda la sociedad es que se está tocando fondo. Ello quiere decir que se deben tomar acciones que retornen la mala dirección al camino correcto. Arreglar esto por el camino de elecciones, donde quienes tienen el poder de invertir en propaganda y de comprar voluntades, con compras que nos recuerdan la venida de los europeos a nuestro país, no puede ser la solución.

Si una siembra tiene una enfermedad que no tiene cura, la solución es arrancar la plantación y replantar con semillas sanas, porque si se quedan plantas enfermas, en poco tiempo se tendrá nuevamente la plaga. Por ello no es el camino buscar la solución siguiendo la corriente a una falsa democracia, al igual que en la agricultura, deben arrancarse las plantas desde su raíz y realizar siembras con semillas nuevas.

Es impresionante cómo personas que tenían una pequeña riqueza, o ninguna, cuando llegaron a ocupar un cargo público, o cuyos parientes se enriquecieron ilícitamente, aparecen en los medios de publicidad criticando a los corruptos y presentándose inclusive a gritos como personas honorables; otros se promocionan con políticos que han robado cientos de millones de quetzales con tal de obtener votos, pero les recuerdo, “dime con quién andas y te diré quién eres”.

jfarimany@hotmail.com

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