PLUMA INVITADA
Mi reflexión para el fin de año
Otro año ha llegado a su final y uno nuevo está por empezar. Hoy, en mi 43º cumpleaños, me encuentro en un momento de introspección, evaluando logros, lecciones en esferas personales, familiares y empresariales. Cada año me pregunto: ¿Estoy mejor que el año pasado? Y este año quiero compartir una reflexión crucial.
El 2023 ha sido desafiante, especialmente con un año electoral decepcionante para Guatemala. Iniciamos el período electoral con una cantidad enorme de partidos políticos y candidatos en contienda, pero con poca propuesta de fondo. Antes de la primera vuelta electoral, el panorama se vislumbraba difícil pero pocos pudimos esperarnos lo que después el futuro nos traería. Tras una desalentadora primera vuelta y una nefasta segunda vuelta, pasamos a vivir una serie de episodios políticos que han perjudicado mucho a Guatemala. Presenciamos cómo políticos y sus seguidores desestabilizaron la economía con dos semanas de paros y tensiones. La división, el discurso de odio y la polarización escalaron a tal nivel que todos nos preguntábamos en qué Guatemala estábamos viviendo. Los berrinches políticos, enfocados en temas que poco contribuyen a la prosperidad del país, sin duda han marcado el año.
Sin embargo, mi conclusión es alentadora: el pueblo guatemalteco persevera y no se rendirá fácil. A pesar de la turbulencia política, seguimos trabajando incansablemente por el bienestar de nuestros seres queridos. Esta resiliencia nos define, ignorando el “pan y circo” que a menudo ofrece la política.
' Los verdaderos guatemaltecos generamos bastante menos show, pero muchísimo más desarrollo.
Eduardo Girón
Guatemala, a pesar de enfrentar obstáculos como la influencia de actores internacionales, la corrupción que frena nuestro desarrollo y el narcotráfico que beneficia a oscuras mafias, sigue luchando. Nuestra economía se mantiene como una de las más resilientes de la región, y nuestra moneda es la más estable de Latinoamérica.
Los guatemaltecos somos trabajadores y somos los que sacamos adelante al país. Los políticos y organizaciones vestidas de mediadores pero con fines e intereses políticos, tanto nacionales como internacionales, generan ruido, escándalo mediático y caos. Los verdaderos guatemaltecos generamos bastante menos show, pero muchísimo más desarrollo, y creo que eso es lo que verdaderamente importa para el largo plazo de nuestro querido país.
En este día quiero extender una felicitación a todos los guatemaltecos que no se dejaron intimidar por las distracciones y desafíos de este año. A aquellos que, en lugar de sumarse a narrativas destructivas, se mantuvieron firmes en su esfuerzo y perseverancia. Héroe es el que sale a trabajar por su familia; héroe es aquel que a pesar de la adversidad se levanta y sale adelante; héroe es aquel que ama a su país y está dispuesto a trabajar por él. Nuestra fortaleza, a pesar del entorno, es la verdadera razón para celebrar este fin de año.
Así que, mientras reflexiono sobre mis logros y lecciones, me siento inspirado por la tenacidad de mi país y su gente. Esta resiliencia es lo que nos mantiene avanzando, sin importar los obstáculos. Para este 2024, no perdamos de vista lo importante. No nos dejemos llevar por la política, por el espectáculo mediático y por los egos de nuestros gobernantes. No dejemos que intereses individuales perturben la estabilidad de nuestro país. Lo más difícil ya lo hemos construido, no dejemos que lo destruyan por luchas de poder. Exijamos que nos den las condiciones para que los buenos guatemaltecos podamos trabajar. Hoy, celebrando mi cumpleaños, le agradezco a Dios, a mi familia, a mis amigos y, de corazón, a todos los guatemaltecos que contribuyen cada día al progreso de nuestra nación.