El desorden y la falta de controles favorece al crimen organizado. En 2015, se capturó a 85 mil viajeros centroamericanos, en la frontera de EE. UU. Si en promedio cada uno pagó Q50 mil al crimen organizado, el negocio arrojó Q4,250 millones. Se distribuye una parte a los puestos del país, otra a empleados corruptos del Instituto Nacional de Migración de México y una cuota alta a guardafronteras de ICE. De esa cuenta, no es fácil detener un negocio con tamaño monto. Como en todo, hay clase ejecutiva, turismo y ofertas. Igual a los aviones, los asientos de primera siempre son menos que las otras categorías.

Los viajeros más precarios viajan sobre los vagones de Ferrocarriles Nacionales de México. Al tren lo llaman la Bestia. A inicios del año pasado, se cercaron los patios de maniobras, en Tapachula. Acompañado con un incremento de las garitas para control de viajeros por carretera. Es el Programa Integral Frontera Sur. Aparentemente la contención de migrantes sin documentación ha iniciado la reducción en las cifras. De 100 mil migrantes deportados en promedio en el primer semestre de cada año, se bajó a 60 mil en el primer semestre de este año (goo.gl/UTDMxr). Esta cifra indica que el volumen de viajeros de bajos recursos se está reduciendo. A largo plazo, la contención de migrantes centroamericanos agravará las tensiones sociales en los países del Triángulo Norte. La mejora en la seguridad debe ser un proceso constante.

Las buenas relaciones entre ambos países se expresan en una zona fronteriza libre de narcotráfico, violencia de pandillas y trata de personas. Pero también deben asumirse nuevas acciones para mejorar la competitividad y generar inversión.

En la evaluación del TLC México Triángulo Norte, realizada por la Dirección de Análisis Económico del Mineco, en marzo de 2013, llamó a promover las exportaciones hacia México, ya que los patrones culturales son similares con los estados fronterizos. Alertó sobre el crecimiento del déficit comercial, no obstante ser moderado. Con las dificultades previsibles con el TLCAN, debidas a Trump, seguramente aumentará dicho déficit.

En ese sentido, el contrabando no se puede vencer únicamente con medidas de seguridad aduanal. Al contrario, el endurecimiento fronterizo solo conlleva un incremento del trasiego ilegal de mercancías baratas frente a nuestra sociedad que abandona la producción.

El estado de Chiapas tiene una población y extensión comparable a cualquier nación centroamericana. Lo mismo ocurre con Tabasco y los dos estados de la península. Esas entidades necesitan dinamizar su economía. Se señala que los chiapanecos tienen un crecimiento negativo en su PIB. Por lo tanto, también a esos estados, les conviene mejorar su desarrollo productivo.

Se necesita estar atentos para que no se repitan gobiernos corruptos como el que pactó una carretera de dos carriles para unir la costa sur de Guatemala con Chiapas y terminó en el latrocinio de Odebrecht. Las rutas turísticas están deprimidas a pesar de las iniciativas de empresarios de la rama económica. El intercambio cultural es de amiguetes, sin ambiciones amplias que reconozcan la hermandad de salvadoreños, hondureños y nacionales, con los chiapanecos, tabasqueños y los de la península.

Mejorar la relación de México con el país y el triángulo norte es un imperativo. La definición de una nueva relación implica para nuestros conciudadanos, abandonar su prepotencia originada en la supina ignorancia de la historia, la realidad social y los deseos de las poblaciones que comparten una frontera.

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