De entrada el año nuevo significa que se favorecerá a la rectitud y la justicia. Por lo tanto, debe esperarse que los juicios contra la corrupción tendrán buen fin, con la condena de los indiciados. Igual, otros antejuiciados habrán de enfrentar las acusaciones sin sus posiciones de poder y abuso.

El gallo es uno de los animales más utilizados en hechizos y adivinación. Se le han atribuido valores medicinales debido a la alectoria, una piedra con supuestos poderes mágicos que se desarrolla en el hígado con la edad del ave. El gallo sana a los enfermos y devuelve la fe a los no creyentes. Recuérdese cómo San Pedro recapacitó, después de negar a Cristo por tres veces, cuando escuchó al gallo. Una buena chilqueada no termina sin que un gallo recorra el cuerpo. Mucho de esto hará falta en la seguridad pública, pues el crimen ha prosperado y se le debe atajar.

En China, lo mismo que en el mundo, el gallo está relacionado con el sol. La cresta ayuda a esa identificación. Se entiende que con más luz, hay un mejor entendimiento. Creerse muy gallo o ser gallito significa el gusto por el pleito.

¡Atención! El presidente es gallo de tierra. El ave lo vuelve ingenioso y confiado, y el suelo lo convierte en práctico. Consúltese las fuentes y horóscopos para observar estas coincidencias. No se inventa nada, las afirmaciones constan en la tradición.

No obstante, ahora es el gallo de fuego, que corrige esos agüeros. El animalito no vuela muy alto, es presumido, calza espolones, mira distante, se desvive por el otro sexo y se levanta antes de que salga el sol para gritar a dos voces.

Recuérdese que tener memoria de gallo significa carecer de la misma. Los nacidos en ese signo pueden olvidar fácilmente sus promesas. De la misma manera, pensar en los anteojos del gallo significa no observar lo inmediato, sino perderse en cavilaciones que impiden estar consciente del entorno. Así, cada vez que se ponen anteojos los nacidos en ese signo, lo hacen sin ningún sentido.

Hay compatibilidad con el dragón, la serpiente y el buey. Así, las mafias ligadas a los poderes imperiales, ocultos y militares pueden sobrevivir. En cambio, los nacidos bajo el símbolo del perro o el conejo deben andar con precaución. Los leales e ingeniosos sufrirán calumnias y ostracismo.

En un palenque es obvio que predomina lo bélico. En este año se efectuarán guerras comerciales: las del brexit, y la imposición de aranceles a China, México y Centroamérica por EE. UU. Así como se calentará el mundo con el desarrollo de la estación para la defensa de gran altura o THAAD, acrónimo en inglés, que se proyecta en la península coreana. Falta ver al gallo en la disputa por los islotes en el Mar de China y las guerras del Medio Oriente. Nadie sabe hasta dónde pueden llegar esos enfrentamientos.

El mundo observará el inicio de la trilateralidad en el poder mundial. Se manifiesta la decadencia de EE. UU. La animosidad rusa despertará suspicacia entre sus vecinos. China por su parte ofrecerá al mundo un ambiente pacífico y desarrollo compartido. La política de archivar disputas y compartir el crecimiento es un principio importante que impulsan los chinos para este año.

Tener presente ese principio ayuda en situaciones pequeñas. Recuérdese que Guatemala y Belice habrán de someter su diferendo a la justicia internacional. Por lo tanto, es válido dejar atrás las desavenencias para fomentar las relaciones mutuamente beneficiosas.

Así pues, aunque sea movido, el canto del gallo llama al trabajo o a cosechar. En consecuencia, seamos optimistas con el gallo rojo, ¡un año nuevo lleno de éxito y realizaciones! Un deseo sincero.

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