Desarrollo de País
Respetando los plazos constitucionales
Hay que destacar que la Corte de Constitucionalidad quitó del camino las maniobras legales.
Hace cinco años no se cumplió con lo que ordena la Constitución Política de la República de Guatemala en cuanto a elegir una nueva Corte Suprema de Justicia para el período 13 de octubre 2019 a 12 de octubre 2024 por una batalla legal donde los magistrados de aquella Corte de Constitucionalidad no tuvieron cuidado con el manejo de los amparos y politizaron el proceso. En esta ocasión hay que destacar que la Corte de Constitucionalidad quitó del camino las maniobras legales por vía de amparo para que se diera la elección, lo cual debe resaltarse y aplaudirse.
Prensa Libre tituló el jueves 3 de octubre la edición impresa así: CC advierte de plazo para renovar cortes, y luego una nota indicando que dicha alta corte confirma que el período de la actual Corte Suprema de Justicia termina el 12 de octubre. El día siguiente, el viernes 4, el titular fue: Gran pacto político logra integrar CSJ en una hora. Y lo más impresionante es lo que sigue en la portada del medio: Mayoría de bancadas alcanza acuerdo sobre 13 nuevos magistrados para Corte Suprema de Justicia; todos reúnen más de cien votos. Y el sábado 5, en la nota de la página 3 dice: Presidente Bernardo Arévalo dice que “sectores corruptos” influyeron en el resultado de la elección.
Mi interpretación del cumplimiento constitucional de la elección de 2024 versus la elección de 2019 es que los integrantes de la CC de 2019 fueron dominados por presiones muy serias y que terminaron con no poder elegir a los 13 magistrados de la CSJ, mientras que en esta ocasión fueron muy serios los magistrados en sus decisiones, lo cual facilitó que se llevara la elección en el Congreso.
Guatemala necesita de la separación de poderes para que los pesos y contrapesos funcionen.
Ahora bien, ¿cómo hicieron para que los 13 electos superaran los cien votos y uno llegara a tener 159? Es impresionante la capacidad de los operadores para poder elegir en una hora a los 13 magistrados. De esa operación hay varios reportes de prensa que indican que los operadores políticos fueron los diputados Luis Aguirre, del partido Cabal; Adim Maldonado, del partido UNE; y Allan Rodríguez, del partido Vamos. Por el comentario del presidente Arévalo en su guion político de la lucha contra la corrupción se entiende que los integrantes del suspendido partido Movimiento Semilla no lograron votos para quienes proponían.
Ya tenemos nueva Corte Suprema de Justicia y esperamos que la próxima semana elijan a los nuevos magistrados de las cortes de Apelaciones. Lo más importante ahora es que los 13 magistrados tomen distancia de quienes los favorecieron en las comisiones de postulación y en el Congreso y ejerzan el cargo con absoluta independencia y busquen profesionalmente cumplir con lo que les ordena la ley. Guatemala necesita de la separación de poderes para que los pesos y contrapesos funcionen y así nuestra república encuentre los caminos correctos para el desarrollo del país buscando siempre el bien común.
Estados Unidos está apoyando la lucha contra el crimen organizado transnacional que incluye narcotráfico y trata de personas, principalmente. Sigue siendo terrible que Guatemala sufra por la actividad de producción de droga en una parte del continente y que para llegar al mayor consumo en la otra parte nuestro país y los ciudadanos seamos afectados. Para que esos esfuerzos coordinados entre Homeland Security e INL con el gobierno de Guatemala sean exitosos también se necesita de un sistema de justicia probo, ágil y práctico.
Y no digamos de la gran necesidad e importancia para la inversión de contar con un sistema de justicia que contribuya a la certeza jurídica. El jueves 10, en el marco del Encuentro Nacional de Empresarios Enade 2024, tendremos la oportunidad de aprender sobre el trabajo que la plataforma Guatemala No Se Detiene ha hecho en materia de certeza jurídica por el bien del país.