Escenario de vida
MARN preparándose para evento mundial
El Acuerdo de París busca que se cumpla la meta de no permitir que la temperatura del planeta suba más allá del 1.5 °C.
Del 11 al 22 de noviembre, estaremos transmitiendo desde la Cumbre Mundial en Azerbaiyán, Bakú, la participación de Guatemala en la “Conferencia de las partes de cambio climático de Naciones Unidas COP-29 y mostraremos cómo Guatemala combina el conocimiento ancestral de sus pueblos indígenas y la naturaleza, jugando un papel fundamental en el manejo sostenible. 195 países verán la riqueza de nuestros recursos naturales e hídricos, ecosistemas y biodiversidad que deslumbrarán al mundo, pero que no podemos perder ante los embates del cambio climático.
Los delegados que van a dicha COP tienen que mantener una posición firme para salvaguardar nuestros medios de vida y reducir nuestra vulnerabilidad.
Somos de los países más vulnerables al cambio climático por nuestras condiciones físicas, geográficas, geológicas y hasta socioeconómicas de nuestros habitantes. Por ende, ya estamos sufriendo dichos embates con sequías, tormentas e inundaciones, que han dejado a miles de personas afectadas, incluyendo la industria, agricultura, seguridad alimentaria, infraestructura y vivienda.
En dicha Cumbre Mundial, Guatemala apoyará la ambición global del Acuerdo de París que busca que se cumpla la meta de no permitir que la temperatura del planeta suba más allá del 1.5 °C respecto de la era preindustrial. Si sobrepasamos esta meta, el planeta entero pondrá en riesgo su seguridad alimentaria, su economía, su infraestructura y su medio de vida, razón por la que los delegados que van a dicha COP tienen que mantener una posición firme para salvaguardar nuestros medios de vida y reducir nuestra vulnerabilidad. De tal forma que nuestra función en esta COP es asegurar que los países desarrollados cumplan con el financiamiento climático que han ofrecido a los países en desarrollo como el nuestro.
A pesar de que nuestra contribución a las emisiones de gases de efecto invernadero a nivel mundial es de únicamente del 0.11% de las emisiones globales, nos hemos comprometido a aumentar nuestra contribución nacionalmente determinada (NDC) para reducir el dióxido de carbono gracias a esfuerzos realizados principalmente en el sector de bosques.
Del 1998 al 2023, Guatemala invirtió con recursos propios US$776 millones en incentivos forestales, y ahora la meta es “deforestación neta cero”, mediante el fortalecimiento del sistema nacional de áreas protegidas y programas forestales. Guatemala ya ha destinado US$6.5 millones al Fondo Nacional de Cambio Climático, con el 80% en adaptación y el 20% en mitigación. En el sector agrícola se han implementado medidas de mitigación y adaptación en cultivos como azúcar, banano, café y palma. Por su lado, la agroindustria azucarera ha generado energía limpia a partir de biomasa de caña de azúcar, generando el 14% de la demanda nacional anual, y hasta el 32% de la demanda eléctrica en el área rural, contribuyendo así a la reducción de emisiones de gases efecto invernadero (GEI).
Guatemala ya creó el Consejo Nacional de Cambio Climático y el Sistema Guatemalteco de Ciencias del Cambio Climático, que reúne centros de investigación y las Mesas Nacionales de Cambio Climático, incluida la Mesa Indígena, y foros de participación de la sociedad civil. Además, Guatemala reconoce que es esencial la inclusión de las mujeres, jóvenes y pueblos indígenas como fuertes participantes para el desarrollo de soluciones innovadoras, sostenibles y equitativas.
Por lo tanto, Guatemala estará pidiendo a la comunidad internacional que cada país garantice el cumplimiento en sus contribuciones nacionalmente determinadas (NDC), para que la temperatura no aumente a más de 1.5 °C para finales de siglo. Vea hoy sábado por Guatevisión 9.30 p. m. un reportaje en primicia, en donde conocerán el trabajo que el MARN hará en dicha cumbre.