Conciencia

La visita de Marco Rubio en un momento clave para Guatemala

La venida del secretario de Estado de los Estados Unidos llega en un momento importante para replantear el desarrollo del país.

Cuando Kamala Harris, vicepresidente de los Estados Unidos, visitó Guatemala el 7 de junio del 2021 muchos ciudadanos se ilusionaron por sus grandes promesas. Su propuesta más interesante: traer a las grandes empresas de tecnología a Guatemala para invertir y generar empleo de calidad. Este proyecto era un buen mecanismo para bajar gradualmente la migración irregular de Guatemala a Estados Unidos, ya que, según una encuesta del BID, 9 de cada 10 migran buscando oportunidades económicas. Anunció también una serie de iniciativas destinadas a abordar las causas fundamentales de la migración desde Centroamérica hacia Estados Unidos. Su frase “por favor no vengan” realmente estuvo fuera de contexto.

Guatemala debe reducir su dependencia de las remesas y construir una economía más productiva.

Lamentablemente muchas de sus propuestas no se concretaron, y Guatemala perdió la oportunidad de contar con plan económico y social para generar empleo. Se gastó mucho dinero, pero no se invirtió en los ciudadanos, ni en programas de desarrollo; y hubo mucha corrupción.

Los tiempos han cambiado; desde el 20 de enero, los republicanos han retomado el poder político en Estados Unidos, liderando la presidencia, así como la mayoría en el Congreso y el Senado. En resumen, sus promesas básicas son: fortalecimiento de la seguridad fronteriza y reforma migratoria; revitalización económica y reducción de impuestos; y fortalecimiento y modernización de la política exterior y defensa nacional.

La semana pasada, el presidente Donald Trump, firmó una orden ejecutiva que suspende temporalmente todos los programas de asistencia internacional por un período de 90 días, con el objetivo de revisar su alineación con las políticas de su administración. En seguida el secretario de Estado, Marco Rubio, emitió una directriz que detiene de inmediato casi toda la asistencia exterior de Estados Unidos, a la espera de una revisión integral. Incluye una pausa en nuevas obligaciones y desembolsos de ayuda exterior, con algunas excepciones.

Como país es una gran oportunidad de lograr soporte y una colaboración estrecha con Estados Unidos y buscar el financiamiento para programas de desarrollo como mejorar la salud, la educación y la capacitación, fortalecer el estado de derecho, mejorar la seguridad ciudadana, atraer inversión extranjera, modernizar la gestión pública e insertar al país la era digital. La historia de buenas relaciones bilaterales, la cercanía con Estados Unidos aunado a que Guatemala no ha negociado con el gobierno de la China le da al país una gran ventaja para fortalecer el vínculo.

Las remesas son importantes para la economía del país. Pero una verdadera política de crecimiento económico debiera basarse en la productividad y el aporte local de más recursos al país y no exclusivamente en conservar o aumentar las remesas. No es un secreto que las remesas superan el ingreso de impuestos en la SAT. El año pasado el ingreso de remesas fue de 21,510 millones de dólares (8.6% mayor respecto al año anterior), mientras que la recaudación de la SAT reportada fue de 102,757 millones de quetzales, aproximadamente 13,174 millones de dólares (con un incremento del 2.76%). Lamentablemente la mayoría de los impuestos se va a pagar burocracia y deuda. No hay inversión en capital humano, infraestructura, ni tecnología en el país.

La visita de Marco Rubio a Guatemala es una gran oportunidad. Es el primer país que visita desde su nombramiento, lo cual el gobierno debe aprovechar para plantear un plan que por un lado se pueda lograr mayor número de trabajos temporales en Estados Unidos y por el otro una estrategia el desarrollo del país que logre condiciones para generar más y mejores empleos, única manera de ir rediciendo la migración irregular.

Fortalecer la seguridad ciudadana y buscar la certeza jurídica es importante; así como crear un ecosistema local favorable a la inversión. Las decisiones que se tomen pueden determinar si seguimos dependiendo de factores externos o si empezamos a construir un futuro diferente.

ESCRITO POR:
María del Carmen Aceña
Ingeniera en Sistemas, con maestría en Administración de Empresas de INCAE. Vicepresidente del Centro de Investigaciones Económicas (Cien). Exministra de Educación. Amante de la vida y de Guatemala