J. Daniel Contreras R. escribió el libro Guatemala. Historia de la moneda en Guatemala. Versión a máquina de escribir antigua en 1955. 154 pp. Esta versión se encuentra en forma inédita en la Biblioteca del Banco de Guatemala.

Con motivo de los 500 años de la llegada de los españoles a Guatemala, busqué información sobre qué moneda utilizaban los indígenas guatemaltecos en esa época. La encontré en el libro referido.

A continuación, un breve resumen del libro y entre paréntesis el número de página.

A la concurrencia de gente que va a vender y comprar en un sitio determinado se le llama en nuestro idioma: mercado. Los indígenas guatemaltecos llamaban tiangues a estas plazas donde vendían y compraban lo que necesitaban para su tipo de vida y costumbres. (4)

Las mercaderías más preciadas les servían como moneda, aunque practicaban mucho el cambio o trueque. Las mantas de algodón sencillas o bordadas en preciosas y policromas plumas, los granos de cacao les servían para hacer la bebida de reyes y nobles, y las plumas de quetzal y otras aves eran las más importantes mercaderías que servían como moneda. (4)

El comercio entre los mexicanos precolombinos y los pueblos maya-quichés que se extendían por el área que hoy es Centroamérica era intenso y activo, como lo prueban los hallazgos arqueológicos y las crónicas antiguas. Cerámica de manufactura azteca, olmeca y de otras procedencias mexicanas se encuentra con frecuencia en las tumbas o edificios arqueológicos diseminados por el área maya de Centroamérica. En toda la región llamada por los arqueólogos “Mesoamérica”, que incluye parte de México y lo que hoy es Centroamérica, era intenso el comercio. Por ejemplo, la cerámica llamada “plumbate” por su atractivo color gris vidriado y su consistencia como de metal era comprada y vendida por toda Mesoamérica. Lo mismo pasaba con el jade, el oro, el algodón, pieles de jaguar y otros animales, sal, plumas de vistosos colores, etc. (4)

Bernal Díaz del Castillo, en su libro Historia Verdadera de la Conquista de Nueva España, nos da una vivida y animada descripción de un mercado de México en el año en que llegó el conquistador Hernán Cortés; y como el mismo tipo estándar de vida y cultura llevaban los pueblos maya-quichés y otras tribus de Guatemala, pueden servir para tener idea de lo que eran aquellos mercados o tiangues de nuestros antepasados… (4)

De la descripción de Bernal Díaz sacamos en claro también que el artículo preferido para usarlo como moneda era el cacao. El cacao, pues, era la mercadería preferida a las mantas, plumas, sal y otros artículos para elevarla a la categoría de moneda. (5)

La similitud de los mercados aztecas con los de Goathemala antigua la corrobora el historiador Fray Francisco Jiménez en su obra Historia de la Provincia de San Vicente de Chiapa y Guatemala cuando dice daban maíz por frijoles y frijoles por cacao… (5).

En resumen, la moneda precolombina puede dividirse así: Moneda Popular. El cacao, por su facilidad para contar y poder llevarlo sin mayor dificultad. (5)

Moneda Cara. Para adquirir cosas de mucho valor: plumas de quetzal, ave considerada sagrada por los indígenas; mantas de algodón sencillas o primorosamente bordadas en plumas policromadas. También intercambiaban pedacitos de jade por granillos de oro. Los cronistas antiguos (algunos) denominan con el nombre de “esmeraldas” a las variedades de jade o de jadeíta. Pero la moneda de la tierra preferida era el cacao. Aún durante la época colonial hacía su aparición para suplir la falta de moneda metálica. (6)