Rincón de Petul

La fiesta de las columnas


Un aplauso a la familia que lo soporta, a los lectores que lo aguantan.

Por la última semana del año, las columnas de este espacio, el Rincón de Petul, organizaron una gala. Se pusieron de acuerdo, apartaron un local y giraron las invitaciones. El listado obedeció a un solo criterio: nadie, sino los artículos del Rincón de 2024, fueron invitados. Quienes recibían sus participaciones andaban de alegría; las ignoradas, en cambio, se sintieron resentidas. Algunas, aunque se sabían de años anteriores, reclamaban el desplante. Y hay que ver el escándalo que armó la del 31 de diciembre pasado a quien, por solo un día, se le pasó por alto. Aun, el plan siguió adelante. 52 invitaciones fueron giradas, porque 52 domingos tuvo este año feneciente. En el festín, sin embargo, aparecieron solo cuarenta y nueve.

Pocas ocasiones hay para perfilar a un grupo como lo puede ser una fiesta de invitados. En ellas se encuentra con cuánta diversidad u homogeneidad se conduce el celebrante. Y así como en el cumpleaños de alguien pueden reunirse más hombres o mujeres, más niños o adultos, o más claros o morenos, así también en la fiesta de las columnas se apreciaron con claridad formas de parametrización. La temática fue asunto determinante. El Rincón de Petul nació como una columna donde predominan escritos sobre la migración. Por ello, no fue de extrañar entonces que de las 52, exacta —aunque casualmente— la mitad —26—, se trataran de ella. Tampoco extrañó, entonces, que ya en la fiesta, las demás las vieran de reojo. Las acusaban de petulantes.

Un aplauso a la familia que lo soporta, a los lectores que lo aguantan.

El salón fue organizado con cinco mesas para ocupar a diez columnas, cada una. De ellas, las petulantes rápidamente acapararon tres. Si alguien desde afuera las hubiera visto, tal vez habría creído que esa era una fiesta exclusivamente para migratorias. Pero la verdad es que en el Rincón hay más que esa simple homogeneidad. En una mesa, por ejemplo, se sentaron cinco columnas que trataron predominantemente sobre política y el gobierno guatemaltecos, en este año que inauguramos gestión. Y en la otra, las que se enfocaron en temas de comunicación y la forma periodística de la columna en sí. De hecho, ocuparon tan importante lugar, que hasta ellas mismas se asombraron al contar que eran 7. Una séptima parte del total de la noche.

Cuando la celebración alcanzaba su final, sus organizadores anunciaron de sorpresa que había reconocimientos para las columnas que merecieron menciones especiales. Algunas se emocionaron, aunque muchas otras sabían que no merecían figurar. Entre estas últimas, artículos de esos retrasados, los que en su momento se vistieron a la carrera, y que por sus prisas lucieron así, desguachipados, cuando fueron publicados. Otras, en cambio recibieron agradecido honor. Al anunciar la categoría de las más leídas en versión electrónica, “El pacto acorralado” y “El inglés del presidente” pasaron al frente. Luego, la categoría de la que más reacción causó; y con medalla salieron “Lo que se quedó allá” y “Autoridades, fíjense en Joselito”.

Hubo baile y hubo tragos; un par por ahí, se subieron de tono. “Política criminal, Conamigua criminal” andaba exacerbada. Razón tenía. Pero dejó la discusión para otro día. Hubo risas y lágrimas. De negro vistieron “Papá”, “Los últimos libros de aquel revolucionario” y “Tesorito encontrado”, tristes por su duelo reciente. Al final, hicieron los recuentos. Calcularon que de las 3 que faltaron, una fue fecha feriado y las otras dos se quedaron dormidas. Por último, calcularon que 3 horas dedica el autor a cada una de ellas. Y eso, por las 49, dio unas 147 horas del año en escribirlas. Agradecieron con un aplauso a la familia que lo soporta, a los lectores que lo aguantan y a la Prensa que lo publicó, en este 2024 que nos despide.

ESCRITO POR:
Pedro Pablo Solares
Especialista en migración de guatemaltecos en Estados Unidos. Creador de redes de contacto con comunidades migrantes, asesor para proyectos de aplicación pública y privada. Abogado de formación.