ESCENARIO DE VIDA
Fuerte reducción en poblaciones de aves de C.A. preocupa a los operadores turísticos
Con toda la biodiversidad de especies de aves en Guatemala y en Centroamérica, es increíble que no se haya sabido aprovechar los beneficios que esto conlleva, especialmente porque podríamos estar atrayendo muchos miles de turistas más que viajan por el mundo sólo para observar aves.
' Gracias a Counterpart International, ya contamos con una herramienta para promocionar a Guatemala como un Santuario de aves exóticas y únicas en el mundo.
Vida Amor de Paz
Cada año, más de 45 millones de estadounidenses participan en la observación de aves y desembolsan aproximadamente entre $32 y $41 mil millones en viajes, expediciones, traslados, alojamientos, y equipos relacionados, lo que contribuye significativamente por año, a la economía estadounidense. Si les motivamos para que vengan a nuestros países, sería una gran contribución a la economía de nuestra región en su conjunto.
Sólo en Guatemala, la avifauna guatemalteca cuenta con un total de 758 especies, de las cuales 1 es endémica, 2 han sido introducidas por el hombre. Lo relevante de ello es que 10 de nuestras especies son consideradas amenazadas a nivel mundial. Según Gabriel Valle de Fundaeco, las aves son fáciles de observar, pero al mismo tiempo son vulnerables, especialmente las aves residentes pues no se adaptan a los cambios en cuanto al clima, altura y hábitat como lo hacen las aves migratorias. Valle enfatiza que es una actividad económica que le permite a las comunidades, atender a los turistas que viajan sólo para que les lleven a ver aves.
Sin embargo, en recientes estudios, 30 expertos en ornitología evaluaron 1,180 especies de aves silvestres y encontraron que 593 especies (52%) tienen declives poblacionales fuertes o severos en Centroamérica por las altas tasas de deforestación, la expansión de la frontera agrícola, la cacería y el crecimiento poblacional urbano. Ellos determinaron que las aves rapaces de gran tamaño, como el águila harpía ya no encuentran refugio en su hábitat natural. Lo mismo pasa con los quetzales en bosques nubosos que ya sufren por el cambio climático. En suma, las poblaciones de aves en Centroamérica tienen más amenazas, en comparación con México, Estados Unidos o Canadá.
Sólo en el humedal de Manchón Guamuchal del Pacífico guatemalteco, encontramos 118 especies de aves migratorias que llegan a visitarnos por la exuberancia de 7,650 hectáreas de manglares (el tamaño de Antigua). Imagínese si ésta y muchas otras regiones del país pudieran ser aprovechadas para el Aviturismo.
Según Miguel Araujo, Presidente de SalvaNATURA, organización ecologista salvadoreña, destacó que diferentes formas de Turismo Rural mejoran las condiciones de vida de los habitantes y contribuyen a reducir la Triple Emergencia Global declarada por Naciones Unidas (Clima, Colapso de Ecosistemas/Extinción de Especies y Contaminación) y por ello están animando a los turistas a participar en un programa integral que apoye la biodiversidad con contribuciones que compensen su huella de carbono basado en el nuevo mecanismo financiero que establecerá en el 2024 el Convenio Global de la Biodiversidad. Con ello, invitan a Guatemala y Honduras, con los que comparten la Cuenca del Río Lempa, para darle vida a un nuevo “Triángulo Verde” que transforme y renueve los “capitales olvidados”, no contabilizados en el Producto Interno Bruto, el Capital Natural, Humano y Cultural.
Hasta hace poco, Guatemala no podía ofrecer al turista un listado oficial de sus especies de aves, pero gracias a Counterpart International, ya contamos con una de las herramientas principales para promocionar a Guatemala como un Santuario de aves exóticas y únicas en el mundo. Sabiendo esto, insto al INGUAT a dirigir sus promociones en esta dirección. Ojalá los nuevos funcionarios públicos del gobierno de Bernardo y Karin puedan ponerle el ojo.