ECONOMÍA PARA TODOS
Ferrocarril oriental y el eléctrico
La historia de los Ferrocarriles de Guatemala se encuentra en el libro editado por el coronel J. Bascom Jones, titulado Libro azul de Guatemala, Nueva Orleans, 1915.
' Ferrovías cuenta con los derechos de única usufructuaria de los bienes de utilidad ferroviaria.
José Molina Calderón
Del capítulo titulado Ferrocarriles de Guatemala se da a conocer su contenido seguidamente. Entre paréntesis, el número de página.
Ferrocarril del Norte: Enumerar uno a uno los muchos contratos que se han celebrado y poner de relieve las exportaciones que algunos aventureros han hecho a la sombra de este magno trabajo, seria de todo punto fatigoso y sin objeto alguno. Baste saber únicamente que desde la época a que nos hemos referido no se hizo trabajo de importancia sino durante la administración del general de José María Reyna Barrios, en que la línea quedó construida hasta el Rancho de San Agustín, por desgracia no con la solidez que requieren aquellos deleznables terrenos. (93)
Durante la Administración del licenciado Estrada Cabrera también se celebraron varios contratos que tampoco tuvieron éxito positivo, hasta el punto de que este gobernante progresista, sin desistir de la grandiosa idea, se empeñó con toda actividad en construir la carretera hacia el Norte; pero aunque esta carretera facilitaba la comunicación con el Atlántico, no podía por manera alguna satisfacer ni llenar las aspiraciones del hombre público que anhelaba un medio más civilizado de contacto con los países cultos; y así trató de celebrar un nuevo contrato con Mr. Percival Farquart, en 1903, como representante de Minor C. Keith y W.C. Van Horne. Hechos los trabajos en su totalidad la línea tiene 195 millas y atraviesa más de 315 puentes, manteniendo hoy un tráfico bastante grande. (93)
El Ferrocarril Panamericano, en la parte que corresponde a Guatemala, está ya terminado y nos pone en contacto inmediato con las líneas férreas de México y con la inmensa red ferrocarrilera de los Estados Unidos. (93)
Conexión con El Salvador: El Libro azul de Guatemala, en cuanto a los ferrocarriles, llega hasta 1915. Después de ese año hubo dos proyectos ferrocarrileros adicionales. El primero, la construcción del tramo de Zacapa a Anguiatú, frontera con El Salvador, con el cual la Irca logró la comunicación internacional con El Salvador, en donde también operaba esa empresa. Incluyendo dicho tramo, la red ferroviaria de la Irca en Guatemala llegó a 524 millas (838 kilómetros de longitud).
Ferrocarril Eléctrico Los Altos: El segundo proyecto fue el Ferrocarril Nacional de Los Altos, que popularmente se conocía como “el Eléctrico”, que conectó San Felipe Retalhuleu con Quetzaltenango, que construyó la firma alemana Allgemeine Elektrizitaets Gesllschaft (AEG), con una longitud de 38 kilómetros, cuyo trazo se hizo en terrenos con pendientes muy pronunciadas de hasta 9%. Operó desde marzo de 1930 a septiembre de 1933, que lluvias torrenciales lo dañaron. La energía eléctrica para la operación del ferrocarril la suministró la Hidroeléctrica de Santa María, construida con solo ese propósito, proporcionando una pequeña cantidad de electricidad a Quetzaltenango. El destino final del ferrocarril fue utilizarse para proveer de electricidad a 33 poblaciones de occidente. La planta eléctrica continúa en operación.
La concesión a Ferrovías: En 1968, la Irca entró en problemas financieros, incluyendo atrasos en los salarios de los trabajadores y finalmente, el gobierno de Guatemala intervino la empresa. No se llegó a un acuerdo con el gobierno y sus bienes fueron rematados por la vía judicial. El Estado concedió a una nueva empresa, Compañía Desarrolladora Ferroviaria, S. A. (Ferrovías), los derechos para ser la única usufructuaria de los bienes de utilidad ferroviaria del país, trasladados al llamado Ferrocarril Bicentenario.