pluma invitada

Erradicar la corrupción es tarea de todos

Erradicar la corrupción es tarea de todos y requiere de nuestra participación.

Las redes sociales no dejan de mencionar la crisis política que vivimos. El Ejecutivo busca erradicar la corrupción de una manera legal, presentando todas las denuncias correspondientes ante el MP.  Sin embargo, por alguna razón que se desconoce, estas no avanzan y, por el contrario, el MP solicita que la CC destituya a funcionarios porque la FG se siente ofendida por comentarios que han emitido.  Todo funcionario público está sujeto a críticas y comentarios que no pueden ser perseguidos legalmente.  Sin embargo, la FG se siente ofendida y ahora solicita la intervención de la CC.  Me pregunto si como particular, sintiéndome ofendido por la aparente protección que el MP brinda a los corruptos, puedo también solicitarle a la CC la destitución de la FG.

Erradicar la corrupción es tarea de todos y requiere de nuestra participación.

La pugna entre el Ejecutivo y el MP sube de tono.  A medida que pasan los días, sus posiciones se vuelven más antagónicas, a pesar de que ambos dicen defender la Constitución.  El enfrentamiento ocurre porque luego de 40 años de un crecimiento desenfrenado de la corrupción, tenemos un gobierno que desea actuar honestamente.  Contrario a sus antecesores, no recurre a la práctica usual de pagos bajo la mesa para lograr la aprobación de sus iniciativas en el Legislativo.  Por supuesto, la reacción del Pacto de Corruptos no se hace esperar, y como tienen cooptado al organismo Judicial, le levantan un muro infranqueable de oposición al Gobierno.  La situación no debería ser así.  Lo deseable es que exista una definitiva colaboración entre los tres poderes del Estado, en donde trabajen juntos y compartan una sola meta: el progreso del país y el bienestar de su población.

El problema mayor para Guatemala es que el referido enfrentamiento ocurre únicamente en las esferas del Gobierno.  Los problemas de Guatemala no se solucionan únicamente entre el Ejecutivo, el Legislativo y el Judicial.  En la lucha contra la corrupción falta el poder más importante, que es el del pueblo.  Por supuesto, a través de las elecciones elegimos a nuestros representantes para la Presidencia y el Congreso, pero ¿cuántos diputados están realmente trabajando para nosotros? ¿o es para su propio beneficio?  El Ejecutivo está solo y así no puede erradicar la corrupción.  La alianza entre el Legislativo y el Judicial le imposibilita actuar.   Muchos aplaudimos al Gobierno en su lucha legal   contra   la corrupción, lo comentamos y hasta lo alentamos, pero no es suficiente.  Igual que durante los pasados 40 años, seguimos siendo unos simples y pasivos espectadores.

Guatemala necesita que la población acompañe al Gobierno en su lucha por erradicar la corrupción.  Necesita de nuestra energía, ya que no basta con solo apoyar pasivamente al Gobierno, debemos asumir un papel mucho más activo.  Cada uno de nosotros debe denunciar cualquier acto de corrupción, así sea un simple pago para evitar una cola al realizar un trámite.  La vía para presentar la denuncia era una llamada al 156, que espero todavía esté vigente.  Los guatemaltecos también podemos manifestar en contra de la corrupción y expresarnos pacíficamente frente a las sedes del Congreso, de la CSJ, del MP y de la CC.  Las manifestaciones pacíficas son efectivas, lo vivimos cuando lograron la renuncia del gobierno del Partido Patriota.

Erradicar la corrupción es tarea de todos y requiere de nuestra participación.  Debemos involucrarnos apoyando al Gobierno para que finalmente los corruptos rindan cuentas y se sometan al peso de la ley.  Somos una república democrática y debemos defenderla apoyando al Gobierno de una manera activa. Debemos denunciar a los corruptos.

¡Guatemala somos todos!

ESCRITO POR:

Carlos R. Paredes

Consultor en desarrollo institucional y empresarial. Máster en Economía Aplicada y Administración de Negocios. Ingeniero Mecánico Industrial. Exdirector ejecutivo del Campus Sur UVG. Exdecano de la Facultad de Ingeniería UVG. Catedrático universitario.