DESDE GINEBRA

El trabajo poscovid

|

Poco a poco el mundo regresa al trabajo habitual de la prepandemia, causado por el virus del covid-19, que se ha mantenido bajo control desde que finalizó la ola de la variante ómicron. Ante esta situación se han relajado las restricciones iniciales y se están revirtiendo muchas de las formas de trabajo que se implementaron durante la pandemia.

' El trabajo después del coronavirus creó la tendencia a trabajar a distancia.

Eduardo Sperisen-Yurt

A esta etapa se le ha dado en llamar “la nueva normalidad”. Muchas personas se acostumbraron al trabajo a distancia y durante este período varias reflexionaron sobre este tema, que no solo constituye un eje importante de la economía, sino que también se relaciona con la convivencia social.

El trabajo después del coronavirus creó la tendencia a trabajar a distancia, está experimentando un impulso decisivo mientras el covid-19 forzó a empresas y organizaciones a imponer políticas de trabajo remoto en un mundo que cada vez proscribe más el contacto físico. El cambio repentino al trabajo digital remoto, masivamente y de la noche a la mañana, tiene el potencial de acelerar los cambios en la forma de trabajar y en nuestras ideas sobre la organización del trabajo.

Los analistas coinciden en señalar que, al irrumpir la pandemia, los sectores de trabajadores de ingresos medios se encontraron en la disyuntiva entre pagar personal de cuidado para sus hijos o renunciar al empleo para cuidarlos ellos mismos.

Sin embargo, este pensamiento tiene su lógica, dependiendo de la situación de cada persona, de poder tomar una decisión de contar con los ingresos para mantener a la familia o buscar nuevas alternativas en un formato remoto de un ingreso autónomo. Lo que se pretende es restaurar aquello que generalmente se llama “calidad de vida”, como lo es pasar más tiempo con los seres queridos, disfrutar del ocio, compartir experiencias, desarrollar talentos, así como proyectos creativos.

Es evidente que la pandemia actual está alterando el mundo en gran medida. Pero, ¿qué pasa ahora cuando la situación de la pandemia está llegando a su fin y la gente está de nuevo volviendo a trabajar en sus oficinas? ¿Es posible que el mundo vuelva a ser lo que era o habrá una nueva normalidad? y ¿cómo será esa nueva normalidad?

El mundo no volverá a ser el mismo y las empresas funcionarán de manera diferente. Millones de personas habrán adquirido experiencia de trabajo a distancia y muchas de ellas serán conscientes de las ventajas del teletrabajo. También habrá personas más necesitadas del contacto humano que tal vez no vayan a la oficina a diario, pero sí querrán trabajar en ella algunos días de la semana. Estamos listos para remodelarlo todo, incluidas las políticas e infraestructuras. Será diferente la nueva normalidad a lo que estamos acostumbrados.

Las empresas visionarias tienen una ventaja competitiva para contratar al mejor personal, independientemente de su ubicación geográfica. Lo que nos hace falta es una buena conexión a internet. No obstante, la mayoría de las empresas ni siquiera consideran esa posibilidad.

En el caso, por ejemplo, de los ingenieros es más fácil de medir, o completan un proyecto o no lo completan; aunque no en todas las actividades, es así, pero para la mayoría de las empresas, tener la capacidad de interactuar con otros y construir algo juntos es tan importante como el desempeño. Por lo tanto, la mayoría de empresas restringen la posibilidad de trabajar desde la casa a empleados a quienes no han demostrado su plena dedicación. Muchas simplemente no creen que los empleados trabajarán estando en casa.

ESCRITO POR:

Eduardo Sperisen Yurt

Embajador. Representante permanente de Guatemala ante la OMC. Fue primer presidente y fundador de la Gremial de Exportadores de Productos No Tradicionales y presidente del Grupo de Negociación multilateral del Acuerdo sobre Facilitación del Comercio de la OMC.