Economía para todos
El Eléctrico después de la Conquista
La Historia del Ferrocarril de Los Altos, ¿Por qué Jorge Ubico se opuso a su reconstrucción?
El libro de mi autoría se titula La Historia del Ferrocarril de Los Altos, ¿Por qué Jorge Ubico se opuso a su reconstrucción? Publicación Especial No. 55 de la Academia de Geografía e Historia de Guatemala, Independiente Editorial Digital y Serviprensa, S. A., 2024, 124 pp.
Durante la época de la conquista no existían vías de comunicación formales, y no fue sino hasta años después, en la época colonial, que se abrieron algunos caminos, y en la época republicana finalmente llegaron los ferrocarriles. El Ferrocarril de Los Altos se inauguró en 1930, cuatro siglos después de la Conquista.
De la batalla entre los españoles y los k’iche’ solo hay relatos escritos y obviamente en esa época no existía la posibilidad de grabar las batallas militares vía métodos audiovisuales. En cambio, el recorrido ida y vuelta de San Felipe Retalhuleu a Quetzaltenango se encuentra en una grabación de cine antiguo de 30 minutos de duración.
Este libro intenta poner por escrito no solo el período de 1881 a 1930, que fue medio siglo de soñar y construir El Eléctrico, como se le conocía, sino los datos económicos de su funcionamiento, de 1930 a 1933, y lo que ocurrió después hasta 1944. En este último período hubo intentos fallidos de construir el ferrocarril.
El libro es fruto de una investigación que inicié en 2004, con ocasión de viajar quincenalmente a Quetzaltenango para atender una actividad educativa. Visité el Museo del Ferrocarril de los Altos, hice amistad con su director de ese entonces, Encarnación Soloj Rodas.
Se incluyen 116 fotografías históricas. Se dan a conocer los costos comparativos entre el Ferrocarril de Ocós y el de Los Altos; el Estado de Ingresos y Gastos de 1931-1932; el Movimiento de Carga y de Pasajeros, y el valor del pasaje.
El último capítulo del libro contiene la historia de todos los ferrocarriles de Guatemala.
Luego se dan a conocer las distintas versiones de por qué Jorge Ubico no autorizó la reparación en 1933, con la opinión de Alonso Castro Conde, jefe de Talleres del Ferrocarril en 1932-1933; Julio Colon Gómez, gerente de la planta hidroeléctrica de Santa María en 1935 a 1944, quien llevó a cabo el desmantelamiento del Ferrocarril y llevó la electricidad con material del Ferrocarril a 33 poblaciones del altiplano de Guatemala.
Por último, la versión oficiosa del gobierno de la República a través del relato de Federico Hernández de León, sobre la expedición administrativa del general Ubico a Quetzaltenango en 1935.
El presidente Ubico nunca dio una opinión escrita. Se da a conocer el destino de los puentes del Ferrocarril cuando era director de Caminos el general de Brigada del Ejército Miguel Ydígoras Fuentes, en 1935. Se colocaron varios de estos puentes en la carretera que estaba en construcción en la Costa Sur. Uno de ellos se puede ver todavía al lado del actual puente en el rio Pinula, que comunica el final de la avenida Hincapié rumbo a Boca del Monte, y otro, el puente Guastatoya, en El Progreso.
El último capítulo contiene la historia de todos los ferrocarriles de Guatemala, que conectaron el océano Pacífico con el océano Atlántico, y el que comunica la frontera de México con la frontera de El Salvador, incluyendo el ferrocarril Verapaz y el de Los Altos.
En los anexos se encuentra la opinión de Alonso Castro Conde, de Julio Colón Gómez, el relato completo del viaje de Jorge Ubico a Quetzaltenango en 1935 y un resumen de lo que fue el ferrocarril “El Eléctrico” y la presa hidroeléctrica del ferrocarril de Los Altos, en opinión de la historiadora Regina Wagner.
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