Quito, Ecuador, construida sobre los 2.850 metros sobre el nivel del mar y fundada en el siglo XVI como “San Francisco de Quito” , fue declarada Patrimonio Cultural de la Humanidad por la Unesco, por poseer el centro histórico más extenso, mejor conservado y menos alterado de América Latina. Sus características arquitectónicas, culturales y naturales le permitieron ser uno de los primeros sitios del mundo con esa mención.

Antigua Guatemala se fundó durante la reconquista cristiana de la Península Ibérica, desde los fundamentos urbanos en los cuales se construyó la ciudad hispanoamericana. La investigación arranca en el reinado de Alfonso X El Sabio y termina en un recorrido en el que resulta indisoluble la unión entre historia y urbanismo.

El momento crucial de este recorrido histórico es el reinado de Alfonso X El Sabio, porque en él se descubre el patrón urbano que sentará las bases de la futura ciudad española en América. Asimismo, aparece la cuadrícula como traza urbana. Palabras clave: ciudad hispanoamericana, historia en el Medioevo español, urbanismo, traza ortogonal.

El origen del trazado ortogonal de las ciudades del Nuevo Mundo fue uno de los temas más estudiados por arqueólogos e historiadores del siglo XX. Muchos sustentan sus estudios con teorías muy diferentes.

Algunos afirman que las nuevas ciudades hispanoamericanas nacieron como referentes de las antiguas ciudades griegas, romanas, medievales españolas o incluso las bastidas francesas. Otros en que la utilización del trazado reticular surge por la necesidad de colonización de los territorios conquistados.

En la primera corriente de pensamiento está Chueca Goitia (2011, p.126), quien afirmó que el trazado de las nuevas ciudades americanas se inspiraba en el trazado de las ciudades regulares construidas al final de la Edad Media en Castilla, durante el gobierno de los Reyes Católicos. De la misma forma, Sánchez Carmona (1992) insistió en que el último eslabón para la construcción de las ciudades hispanoamericanas fue el campamento de Santa Fe en Granada. Además subrayó que Borah, Lluberes, Palm, Torres Balbas y Jose María Magaña afirmaban que el origen de la traza regular se ubica en la larga tradición occidental, consolidada en la época de los griegos, desarrollada por los romanos en sus “castros” y continuada en la Alta Edad Media con las bastidas.

En 1778, “el plano de la nueva ciudad de Guatemala de la Asunción ha sufrido a lo largo de su historia tres cambios de ubicación. La primera fundación fue realizada por Pedro de Alvarado, que recibió el nombre de Santiago, y se sitúa a los pies de los volcanes de Fuego y de Agua. Después de una fuerte inundación en el año de 1524, este asentamiento recibe el nombre de Ciudad Vieja, asentándose de nuevo en el valle de Xoro Tenango. La que hoy es conocida como «La Antigua» fue durante más de dos siglos una influyente capital regional que creció según el clásico esquema de «cuadrícula» hasta formar un conjunto urbano. La traza de la nueva ciudad de la Antigua Guatemala fue proyectada por Luis Díez Navarro y revisada por varios profesionales en especial con un esquema perfectamente cuadrado de plaza central y manzanas de diferentes tamaños siempre dentro de un trazado ortogonal.