Construyendo ideas

Carta abierta a los magistrados de la CSJ

¿Qué esperamos de ustedes? En primer lugar, independencia judicial.

Soy un ciudadano que, como muchos, tiene la esperanza de ver una Guatemala más justa y próspera. Un ciudadano que cree que es imprescindible mantener la independencia y administrar la justicia sin hacer caso de afinidades políticas; y eso es lo que quiero pedirles.

¿Qué esperamos de ustedes? En primer lugar, independencia judicial.

Nuestro país ha atravesado momentos difíciles, en los que hemos visto cómo la confianza en las instituciones se ha debilitado. Así que quiero recordarles que hoy y ahora su rol es crucial. Cada una de sus decisiones sumará o restará directamente a la credibilidad y a la paz. Ninguna de sus acciones será indiferente. Están llamados a fortalecer el sistema de justicia, para que este sea ese pilar sólido e inquebrantable que brinde seguridad y esperanza a los ciudadanos.

¿Por qué no decirlo? Ustedes son los guardianes de la justicia y este es uno de los valores que incide directamente para alcanzar la paz. De más está decir que su responsabilidad no es hacia ningún gobierno ni grupo de poder, sino hacia el pueblo de Guatemala y el respeto al Estado de Derecho. ¡Cuánto tiempo llevamos luchando por estos valores democráticos!

¿Qué esperamos de ustedes? En primer lugar, independencia judicial. Cuando los jueces y magistrados actúan sin dejarse influir por presiones externas, los ciudadanos podemos confiar en que se están tomando decisiones justas y equitativas. La separación de poderes no es un concepto teórico, sino una necesidad práctica para que las leyes se apliquen de manera justa y sin favoritismos. Y cuando hablo de poderes, no me refiero solo al legislativo y al ejecutivo, sino también a todos los que quieren beneficiarse de una justicia parcializada.

No podemos permitir que los grupos de interés determinen el rumbo de la justicia en nuestro país. En los últimos años, hemos visto ejemplos de cómo ciertos actores han tratado de usar la justicia para perseguir o proteger a determinados individuos o sectores. La justicia selectiva es una forma de injusticia, y no debe tener cabida en Guatemala.

Les pido ser garantes de los derechos consagrados en la Constitución, diligentes en la carga de trabajo para evitar la mora judicial y buscar el estricto cumplimiento de la ley y sus límites especialmente a los jueces de menor jerarquía y funcionarios.

En segundo lugar, los guatemaltecos esperamos transparencia. Este es otro principio fundamental para el buen funcionamiento de la justicia. Las decisiones judiciales deben ser claras y accesibles para todos los ciudadanos. Un sistema judicial transparente es uno en el que las personas pueden entender por qué se toman ciertas decisiones y confiar en que estas se basan en la ley, no en intereses ocultos. Solo así se tendrá la tan anhelada certeza jurídica, clave para tantos aspectos como atraer inversión, progreso económico y desarrollo sostenible.

Ahora bien, sé que la responsabilidad que han asumido es enorme. Sé que no será fácil resistir las presiones, pero confío en que ustedes sabrán estar a la altura de las circunstancias. Es más, sepan que todo un pueblo espera lo mismo: magistrados fuertes e incorruptibles. La historia juzgará su labor, y espero que, cuando miremos hacia atrás, podamos recordar este período como uno en el que la Corte Suprema de Justicia se mantuvo firme en sus principios y defendió la justicia para todos, sin distinciones.

Como se afirma al finalizar el juramento ante el Congreso: “Si así lo hicieren, la patria los premie. De lo contrario, la historia y el pueblo se los exija y demande”.

Como ciudadano guatemalteco, les hago un llamado para que actúen con rectitud, valentía e independencia. Que su trabajo sea un ejemplo de lo que significa servir a la nación con integridad y dedicación. Guatemala lo merece.

ESCRITO POR:

Pedro Cruz

Ingeniero Industrial y magíster en Mercadeo Global Analista político. Emprendedor de iniciativas para el desarrollo de Guatemala

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