En el salón de protocolo del aeropuerto La Aurora, acompañado de su hermana Edna, su hija Gabriela y su ex esposa Evelyn Morataya, el ex mandatario se dirigió y aunque no descartó participar en la actividad política, hizo enfásis en que no viene a buscar cargos de elección popular, más bien a integrar un grupo plurisectorial que proponga un cambio en el país.
“Regreso con una política de bondad, de manos abiertas... No traigo una política para beneficiar a ningún candidato, si apoyara a un candidato en particular estaría desperdiciando una oportunidad histórica en el país de llegar a un acuerdo nacional”, dijo Portillo.
El ex mandatario sin embargo no descartó su participación política: “No estoy diciendo que no vaya a participar, estoy diciendo que no es mi objetivo principal, no es mi propósito, mi propósito va más allá de eso, de qué sirve una voz en el Congreso”.
En frente multisectorial
Agregó: “Todos los seres humanos, el mayor criminal, el mayor defraudador, el mayor cometedor de errores tiene algo de valor, algo en su corazón y su mente, no marginemos a nadie y nosotros somos una sociedad que ha marginado a una gran población”.
El ex mandatario también insistió en que el país necesita una reforma integral, incluídos cambios a la Constitución; también resaltó la falta de credibilidad de la población hacia las instituciones gubernamentales, acción por la que se debe trabajar.
Portillo también critico las actuales propuestas políticas, señalando que no están enfocadas en las necesidades actuales del país.
“No hay una sola propuesta que hable de reformar la constitución, no hay ninguna que vaya a acabar la estructura del contrabando”, señaló el ex mandatario.
Agregó: “No quisiera aprovechar ese apoyo de la gente solo para apoyar un proyecto que a los tres años no genere confianza”.
La llegada
Puntualmente el avión donde viajó Alfonso Portillo desde Estados Unidos, aterrizó en el aeropuerto La Aurora, para ofrecer una conferencia de prensa a decenas de medios de comunicación y miles de simpatizantes, que desde tempranas horas de este miércoles llegaron a la términal aérea para recibirlo.
“Soy feliz, estoy con mi hija”, fueron las primeras palabras del exmandatario luego de aterrizar el avión a las 20.05 horas, que lo traladó desde Denver, Colorado y con una escala en Houston Texas.
El expresidente de 63 años llega a Guatemala después de cumplir una condena por lavado de dinero en Estados Unidos, sentenciado por la Corte del Distrito Sur de Nueva York, Robert Patterson.
Siguiendo el proceso como cualquier viajero, el ex mandatario fue sometido a los controles migratorios de rigor, antes de ingresar a la sala de protocólo de La Aurora.
El mandatario viajó en primera clase, de un vuelo comercial y después de atender las preguntas de la prensa, pasará la noche en casa de su madre en San José Pínula.
Bienvenida
Una caravana organizada por el Frente Nacional Portillista (FNP) llegó a la terminal aérea en espera del exmandatario desde horas de la mañana y poco a poco se han sumado más simpatizantes hasta llenar los espacios fuera de La Aurora.
Desde el mediodía, vendedores con artículos de Portillo se apostaron a inmediaciones del aeropuerto La Aurora. Los comerciantes venden sombreros, bufandas, banderas y afiches con el rostro del exgobernante.
A eso de las 16 horas, decenas de simpatizantes se situaron en la salida de pasajeros con pancartas y carteles. “Licenciado Alfonso Portillo, bienvenido” y “Este pollo le dará sabor al caldo”, son algunos de los mensajes escritos en mantas y rótulos.
Minutos después llegó a la terminal aérea, Eduardo Arévalo Lacs, exministro de la Defensa en el gobierno de Alfonso Portillo. Más tarde se unió el exvicepresidente Juan Francisco Reyes López, amigo personal del exmandatario.
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