Información de la Dirección General de Migración, presentada por Carlos Barreda, diputado de la Unidad Nacional de la Esperanza (UNE), da cuenta de que Karsten permaneció en el país del 6 al 9 de abril, y otras dos veces, en mayo.
Según el informe migratorio, el 6 de mayo último Karsten entró vía terrestre desde El Salvador; las otras dos veces, por aire, desde Panamá, todas con una permanencia de tres días en el país y supuestamente como turista.
Sin embargo, Barreda afirmó que en tres las ocasiones la SAT le brindó un vehículo blindado y piloto, para trasladarlo. Agregó que en la visita del 19 al 22 de mayo hubo una reunión en el Hotel Princess, donde la SAT pagó Q14 mil 550 por alquiler de salón y comida.
“En total se tiene información de que hubo 13 viajes a Guatemala, entre Karsten y Luis María Balbuena, gerente de sistemas de Kolektor, y ya se pidió la información detallada a Migración”, añadió Barreda.
Recobran la memoria
Los cuatro directores titulares de la SAT reconocieron que durante sus viajes, entre el 2012 y 2013, a Córdoba se reunieron con representantes de la empresa Kolektor.
Aunque hace una semana, cuando los cuatro directores fueron cuestionados por los mismos diputados de la UNE sobre sus viajes a Argentina dijeron que no recordaban con quienes se habían reunido, ayer explicaron que hubo encuentros con funcionarios del Ministerio de Hacienda de Córdoba y representantes de Kolektor.
Sin embargo, el director Henry Almengor indicó que en Guatemala no se han reunido con ninguna firma. “En Argentina sí, pero hasta después me enteré de que pertenecían a esa empresa”, argumentó.
Al igual que Almengor, los directores Rodrigo Montúfar, Mario Velasco y Jorge Borstcheff confirmaron que durante sus viajes a Argentina hubo comunicaciones con personal de Kolektor, sin precisar con quiénes.
“Fueron pláticas con varios técnicos que explicaron cómo hacían sus procedimientos y cuadros estadísticos favorables” para mejorar la recaudación, indicó Borstcheff.
El resto coincidió en que las reuniones en Argentina fueron de trabajo y para conocer los procesos implementados en Córdoba, con la intención de traerlos al país y elevar la recaudación.
Aunque los directores negaron cualquier negociación con Kolektor, reconocieron que técnicos de esa empresa explicaron en su visita a Argentina que el funcionamiento de un sistema en Guatemala podría elevar la recaudación tributaria.
A la reunión también habían invitado al superintendente, Carlos Muñoz, quien se excusó por segunda vez de asistir.
Por decisión del Directorio, se revocó el viernes último el proceso de contratación para una asesoría externa de la SAT, que contempla una comisión de hasta Q274 millones de superar la meta de recaudación.
Demandan investigación
Del Directorio dijeron desconocer los detalles revelados por el parlamentario de la UNE durante la citación.
“Se tendría que solicitar una investigación para que se aclare lo sucedido, porque no se tenía conocimiento de estas visitas y reuniones”, aseguró Velasco al finalizar la citación.
Anthony Segura, secretario general del Sindicato de Trabajadores de la SAT, también presente en la reunión, dijo desconocer sobre la visita de Karsten e insistió en que eso es causal suficiente para demeritar “la transparencia” de la contratación y razón para mantener la solicitud de sustitución del superintendente.
“Él —Muñoz— debió haber sido sustituido desde el año pasado, por no alcanzar las metas de recaudación, según la Ley Orgánica de SAT. Está ejerciendo de forma ilegal”, señaló Segura.
Según informes de la SAT, desde agosto del 2012 viajó el entonces superintendente, Miguel Gutiérrez, a Córdoba y le siguieron 11 personas más, entre directores, funcionarios y gerentes de la entidad, hasta finalizar con el actual jefe de esa institución, Carlos Muñoz.
También confirman el detalle de viáticos pagados por la SAT, que indica que se cancelaron Q327 mil en viajes a Argentina, mientras los boletos aéreos de Gutiérrez, Muñoz y Sergio Barillas, gerente de Informática, habrían sido absorbidos por quienes giraron la invitación, aunque ni los favorecidos ni en la SAT saben quién fue el benefactor.
Asesoría
Cuatro defienden revocatoria
Los cuatro directores de la Superintendencia de Administración Tributaria (SAT) señalaron que la decisión de revocar el dictamen DCC-SAT-045-2014, aprobado el pasado 12 de junio, fue una postura unánime que tomaron el pasado viernes en reunión del directorio de esa entidad, a partir de conversaciones en torno a los efectos que la noticia había causado en el país y el desgaste que en ese momento causaba para el ente recaudador.
Sobre la amenaza del presidente del país, Otto Pérez Molina, de destituir al directorio, el pasado sábado, por negarse a autorizar la contratación de una asesoría externa, los funcionarios negaron que se sientan intimidados y, por el contrario, desafiaron al Ejecutivo a buscar causales válidas para removerlos del cargo.
Durante la citación con diputados de la UNE, los directores concedieron el beneficio de la duda a Pérez Molina en relación con la potestad que pueda darle la ley para tomar esa decisión y señalaron que están “tranquilos” con el desempeño del directorio hasta ahora al frente de la SAT.
Rodrigo Montúfar, uno de los cuatro directores titulares y quien dijo que apoya la revocatoria, pero por motivos personales se ausentó de la sesión, incluso ofreció su renuncia si le demuestran que existe alguna causal justificada o si se considera que ha tomado alguna decisión en contra de los intereses de la entidad recaudadora.
“Hasta ahora no hay ninguna causal, a excepción del dictamen revocado”, expuso Henry Almengor, director titular de la SAT, sobre las declaraciones dadas por Pérez Molina.
Los motivos para la remoción de algún miembro del directorio están señaladas en el artículo 27 de la Ley Orgánica de la SAT, entre las que se incluyen cometer actos fraudulentos y actuar con manifiesta negligencia, y deberán ser remplazados a través de un proceso de postulación donde el presidente elige a los sustitutos.
La decisión de revocar el dictamen y frenar el proceso de contratación de una asesoría externa para la SAT fue tomada durante la reunión del directorio el viernes último, cuando tres de los cuatro miembros votaron en contra del proyecto, uno estuvo ausente y Dorval Carías, ministro de Finanzas y quien preside la sesión, fue el único que abogó por el contrato.
Los cuatro integrantes titulares del directorio coincidieron en que no era necesario “el desgaste” de la institución al aprobar un evento de licitación para contratar una asesoría externa y estuvieron de acuerdo en proponer que sea a través de mesas técnicas que se busque un fortalecimiento de la recaudación tributaria.
Según Mario Velasco, durante la sesión del viernes Carías intentó detener la votación y suspender la sesión, lo que no fue respaldado por los otros integrantes, quienes insistieron en conocer la revocatoria.
“El Ministerio de Finanzas busca una mejora, porque se necesitan los recursos y por eso se votó a favor de contratar una consultoría”, explicó el viceministro de Finanzas, Edwin Martínez, durante la citación.
Los directores confirmaron que no hubo ninguna presión ni llamadas telefónicas para intentar cambiar su voto y que, con excepción de la cartera de Finanzas, todos estuvieron de acuerdo.
“El viernes manifesté que era prudente dejar sin efecto —el dictamen— y plantear otras medidas, como una comisión técnica para definir medidas urgentes. Es posible que también se acuda a la cooperación internacional como recurso adicional”, aseguró Montúfar.
3 a favor, de revocar el dictamen fueron Mario Velasco, Henry Almengor y Jorge Bortcheff.
1 en contra, el ministro de Finanzas, Dorval Carías, defendió la contratación de firma asesora.
1 ausente, Rodrigo Montúfar estuvo presente en la sesión, pero se retiró antes de la votación.