Con su poca capacidad de caminar, el can fue adoptado por Brooke Burton quien decidió buscar una solución al problema.
Así fue como el perro comenzó a hacer ejercicio y a seguir una dieta estricta, Los resultados fueron asombrosos: perdió 40 libras en menos de cuatro meses.
La vida de Dennis cambió radicalmente. Ahora corre, juega y disfruta ser un perro normal con una alimentación acorde a su estatura y raza.