“Iré al cielo y jugaré allí hasta que llegues conmigo”

En el mensaje desgarrador la desconsolada madre abrió el corazón para compartir lo ocurrió poco antes del doloroso momento en que su hijo fue declarado muerto.

“Dos meses, desde la última vez que te abracé, escuché lo mucho que me amabas y besé tus dulces labios. Dos meses desde que nos acurrucamos, dos meses de infierno absoluto”, escribió.

Scully compartió la conversación que tuvo con su hijo después de averiguar que el cáncer ya no era tratable.

Madre: Duele respirar, ¿verdad?

Nolan: Sí…

Madre: ¿Sientes mucho dolor verdad bebé?

Nolan: -Mirando hacia abajo- Sí.

Madre: Esto del cáncer es lo peor. Ya no tienes que pelear.

Nolan: -Con felicidad- ¿Ya no? ¡Lo haré por ti mami!

Madre: ¿Eso es lo que has estado haciendo? ¿Luchar por mamá?

Nolan: Sí.

Madre: Nolan Ray, ¿cuál es el trabajo de mamá?

Nolan: -Con una sonrisa- Mantenerme seguro.

Madre: Cariño… ya no puedo hacer eso aquí. La única manera que puedo mantenerte a salvo es en el cielo. -Mi corazón se rompe-.

Nolan: Entonces iré al cielo y jugaré ahí hasta que llegues conmigo. ¿Llegarás verdad mami?

Madre: ¡Absolutamente! Usted no puede deshacerse de mamá tan fácil.

Nolan: Gracias mami.

La muer dijo que, durante su último día, se separó de su hijo solo por un momento para ducharse y cuando regresó a su habitación y los médicos dijeron que había entrado en coma.

“Cuando abrí la puerta del baño los doctores rodeaban su cama, voltearon a verme y con lagrimas dijeron que estaba en un sueño profundo y que ya no podía sentir nada. Las respiraciones de mi hijo eran  laboriosas, su pulmón derecho había colapsado”, relató la madre.

“Corrí a meterme en la cama con él y puse mi mano en el lado derecho de su cara, luego ocurrió un milagro que nunca olvidaré: mi ángel tomó aire, abrió sus ojos, me sonrió y me dijo que me amaba. A las 23:54 horas falleció mientras yo le cantaba al oído”, dijo la mujer.

Scully puso una imagen en la que se ve a su hijo acurrucado en la alfombra del piso del baño mientras esperaba que ella terminara de ducharse.

“Mi hijo estaba aterrado de dejar mi lado, incluso mientras me duchaba. Ahora soy yo quien se aterra cada vez que se baña porque no tengo más que una alfombra vacía, en la que alguna vez mi hermoso y perfecto niño se acostó en espera de su madre”, expresó Scully.

El menor fue diagnosticado en 2015 con un tipo de cáncer que se desarrolla en los tejidos y los huesos. El pequeño fue llevado al médico cuando su madre notó que tenía problemas para respirar, los cuales en un principio pensó que eran porque tenía la nariz tapada.