La bala mató al animalito, pero rebotó en su caparazón, luego rebotó en una cerca, entró por la puerta trasera de la casa de la suegra y alcanzó a ésta en la espalda.
Carol Johnson, de 74 años, sufrió heridas que no ponen en peligro su vida.
El detective Bill Smith dijo que la mujer estaba caminando y conversando después del hecho.
McElroy se encontraba a unos 100 metros de la casa cuando efectuó el disparo.