En julio de 2017, el hombre llamó a la Policía para reportar por primera vez el comportamiento de Ades, de 31 años, que se encontraba estacionada en su automóvil frente a su casa y que le mandaba constantes mensajes de texto a pesar de que le había dicho que ya no quería saber de ella.
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Según documentos judiciales, los agentes encontraron a Ades frente a la vivienda de la víctima y le dijeron que desistiera de su comportamiento y se retirara, pero poco después el hombre comenzó a recibir mensajes de texto amenazantes.
En abril pasado, la víctima llamó de nuevo a las autoridades alertándoles de que, a través del sistema de vigilancia que había instalado en su casa, podía a ver a Ades en el interior de su vivienda.
Cuando los agentes llegaron al domicilio, la mujer estaba tomando una ducha en casa de la víctima y hallaron un gran cuchillo de carnicero en el asiento del pasajero de su auto, según documentos judiciales, por lo que fue detenida y acusada de allanamiento.
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Después de que Ades fuera puesta en libertad, supuestamente comenzó a enviar mensajes de texto más amenazantes a la víctima y tres semanas después el afectado llamó a la Policía para informar que la mujer se había presentado en su negocio haciéndose pasar por su esposa.
Ades fue arrestada de nuevo, esta vez bajo cargos de amenaza, intimidación y acoso, y se presentará ante una corte el 15 de mayo.
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