Reeves está en una etapa avanzada del Alzheimer. “Mi papá ha sido mi héroe toda mi vida y sé que, si estuviera sano, estaría en mi boda en primera fila” , declaró Miriam Davis, de 31 años, al periódico The Blade antes de la ceremonia.
“Y yo pensé: Por qué no trasladarla aquí, sería un evento aún más especial?” ‘ Originalmente, Davis y su prometido pensaban casarse en su iglesia en Ypsilanti, Michigan, pero a ella le preocupaba sacar a su padre del asilo.
La institución se mostró entusiasmada de celebrar la ceremonia, dijo ella, agregando que su padre todavía la conoce pero habla poco y no puede valerse por sí mismo.
A Reeves, veterano de la guerra de Vietnam, le diagnosticaron la enfermedad del cerebro en 2006 y hace dos años lo colocaron en el asilo en Toledo cuando sus síntomas empeoraron.
También fue capellán de la policía durante algún tiempo. En sus últimos años laborales fue pastor de la Iglesia Nueva Creación en Detroit. Marie Reeves, madre de Davis y esposa de Bernard Reeves, dijo que aunque su esposo pudo no haber comprendido todo lo que estaba ocurriendo el sábado su simple presencia en la ceremonia significó muchísimo.