Esto sucedió hace unos días en el distrito de Uskudar, ubicado en Estambul, la capital turca.
Mesut Duran fue quien arrojó el sofá a la calle. Acababa de comprar uno nuevo, por lo que deseaba deshacerse del mueble. Sin embargo, no quería cargar el sofá por las gradas, por lo que decidió tirarlo al vacío el pasado 9 de junio.
Después de que cayera el sofá en sus pies, se puede ver a la mujer que mira hacia arriba y levanta la mano para reclamarle a su vecino.
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En una entrevista para el medio DHA, Duran dijo: “Compré un sofá nuevo. Miré y vi que no había nadie enfrente del edificio. Decidí que estaba bien tirar el sofá del edificio. Mi vecina salió del edificio justo cuando tiré el sofá. El sofá casi le cayó encima. Estaba asustada. Yo también me asusté cuando ella salió de repente del edificio. Tuvo suerte porque hubiera muerto”.
Los recolectores de basura de la ciudad se llevaron el sofá.