Según el rotativo, el diputado, Nader Ghasipur, del oeste de Irán, dijo el miércoles que en el Parlamento de Teherán “no hay lugar para mujeres y burras”.
Además, el legislador advirtió que podría “pasarles algo”, una expresión que en la lengua coloquial persa también tiene una connotación sexual. A los reformistas masculinos les habría calificado como “susul” (homosexuales).
Ghasipur desmintió la información de Ghanoon. Sin embargo, el periódico asegura que tiene un video de las palabras pronunciadas por el diputado. Las afirmaciones son “tan vulgares que no se pueden publicar todas”, escribió la agencia de noticias ISNA.
Las manifestaciones de Ghasipur también fueron condenadas enérgicamente el viernes en las redes sociales.
Los reformistas agrupados en torno al presidente Hassan Rohani, entre ellos 14 mujeres, habían logrado un gran éxito en las elecciones celebradas el pasado viernes para renovar el Parlamento y el Consejo de Expertos.
En el distrito electoral de Teherán, estratégicamente importante, los reformistas ganaron todos los escaños parlamentarios, 30 en total, y 15 de los 16 asientos en el Consejo de Expertos, un influyente gremio religioso.
Menos mujeres de lo previsto
El nuevo Parlamento iraní cuenta con 14 diputadas, a las que se podrían sumar nueve más tras la segunda vuelta de los comicios legislativos que se celebrará en abril, según los resultados de las más recientees elecciones celebradas el pasado viernes.
En dichos comicios concurrieron 580 mujeres. La cifra de 14 diputadas apenas supera en cinco a las que hasta ahora había en la Cámara. Las mujeres aspiraban a poder lograr un 30 por ciento de los 290 escaños que componen el Parlamento.
A pesar de que los seguidores de la línea dura han conseguido mantener algunas provincias, los reformistas que apoyan al presidente Hassan Rohani, entre ellos ocho mujeres, se hicieron con los 30 escaños que proporciona el distrito de Teherán, de importancia estratégica.
Destacados políticos seguidores de la línea más conservadora no salieron elegidos.
