Todas estas cuentas se han cerrado pero su contenido se ha guardado en una base de datos para investigación científica, apuntó la empresa.
El gigante estadounidense explicó que la red de cuentas chinas se descubrió utilizando herramientas instaladas en agosto pasado para borrar las cuentas vinculadas a Pekín durante las protestas en Hong Kong.
Esa red publicó tuits, principalmente en chino y probablemente destinados a la diáspora, “difundiendo teorías geopolíticas favorables al Partido Comunista Chino, al tiempo que apoya teorías engañosas sobre la dinámica política en Hong Kong”, explicó Twitter en una nota de análisis.
Esas miles de cuentas también han servido para promover las opiniones de Pekín sobre la lucha contra el coronavirus y las protestas antirracistas en los Estados Unidos, apuntó el grupo de expertos australiano ASPI, que analizó el flujo de tuits.
“Si bien el Partido Comunista Chino no permite que el pueblo chino use Twitter, nuestro análisis muestra que no duda en usarlo para difundir propaganda y desinformación internacionalmente”, dijo un funcionarios de ASPI, Fergus Hanson, en su nota de análisis.
En cuanto a la red de cuentas turcas, detectada a principios de 2020, se dedicó principalmente a la promoción del presidente Recep Tayyip Erdogan y el partido gobernante, según Twitter.