A pesar del ataque directo, Pionyang no había respondido a sus palabras hasta un día después de que Trump pusiera punto final a una extensa gira por Asia, que lo ha llevado, además de a Corea del Sur, a Japón, China, Vietnam y Filipinas.
En este sentido, el artículo del Rodong asegura que Pionyang “ha observado con paciencia los ridículos actos de Trump hasta el final”.
El texto informa además de que el líder de la Casa Blanca ha sido condenado a muerte en Corea del Norte por varios crímenes como “profanar la dignidad” del régimen y por “soltar toneladas de basura para pintar de manera muy negra la vida feliz de los habitantes de Corea”.
La visita de Trump a Asia estuvo muy marcada por las tensiones con Corea del Norte y el llamamiento a la comunidad internacional para que esté unida a la hora de condenar y presionar al régimen de Pionyang para que ponga fin a su programa nuclear y de misiles.
Las referencias del político republicano a Corea del Norte fueron constantes e incluso llegó a llamar a Kim Jong-Un “gordo y bajito”, sin que los medios oficiales de Pionyang hayan contestado hasta ahora a ello.
Tras un año de repetidos ensayos de misiles, Corea del Norte lleva sin lanzar un solo proyectil desde el pasado 15 de septiembre, cuando disparó un misil de alcance medio que sobrevoló Japón.