El pequeño y su padre comenzaron el arduo camino de conquistar las redes sociales el 19 de marzo con el primer “video de prueba”.
Como era de esperarse, 10 días después, la cosecha solo había llegado a 35 suscriptores, pero el anhelo de Tomás por ser un youtuber se comenzó a viralizar y el contador comenzó a escalar, según la prensa chilena.
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Fue así como el canal Tomiii 11 consiguió un millón de seguidores en cuestión de días -hasta ahora ya van 2.8 millones-, así que Youtube tendrá que ponerse las pilas para enviar plaqueta conmemorativa de los 100 mil y del millón de suscriptores.
El contenido de Tomás es variado. Si bien ha hecho videos de saludos, reseñas de electrónicos y su experiencia en el hospital, otras han sido para denunciar que gente inescrupulosa ha usado su historia para conseguir dinero.
En fin, el sueño de Tomás avanza, ahora con la meta de los diez millones de seguidores.
