Según las hipótesis de las autoridades, el principal motivo de este crimen era provocar el mayor dolor posible a su exesposa de quien no quería separarse.
Las autoridades aseguran que fue un homicidio planificado, pues antes de salir del hotel donde perpetró el crimen, Martín Ezequiel Álvarez Giaccio, de nacionalidad argentina, se aseguró que la madre del pequeño fuera al lugar para encontrarse con la dolorosa escena.
Datos recabados por las autoridades establecen que el hombre estuvo en la piscina del hotel y tomó fotos que envió en mensaje a su expareja junto con varias amenazas.
“Te dejo en el hotel lo que te merecés”, decía el último mensaje que envió.
Luego del hecho, Giaccio tomó un taxi y se dirigió al aeropuerto. En un video divulgado se logra observar cuando se bajar de un taxi y posteriormente se dirige hacía una zona boscosa en donde horas más tarde fue localizado su cuerpo.
Para localizar al sospechoso, las autoridades utilizaron utilizaron drones y helicópteros para hacer rastreos en los alrededores del aeropuerto, pues era la locación en donde se había visto por última vez.
Los hechos
Nada de lo sucedido en ese hotel fue casualidad. El hombre se aseguró de que la madre del pequeño, de nombre Leo, fuera quien encontrara el cadáver.
Sin embargo, por cuestiones de protocolos y de bioseguridad, los encargados del hotel no le permitieron subir a la habitación, por lo que tuvo que llamar a la Guardia Nacional para que pudieran acceder al lugar.
Al llegar al séptimo piso del hotel y a la habitación indicada, visualizaron la impactante imagen: Leo estaba bajo la cama sin señales de vida. Estaba inconsciente y con el rostro morado. Los cuerpos de socorro no pudieron reanimarlo.
El pequeño murió por asfixia, confirmaron los peritos al descubrir el cuerpo del menor.