De momento se confirmó la muerte de tres personas en la explosión ocurrida el sábado en Saint Helier, la capital de esta isla situada en el Canal de la Mancha, a causa de una presunta fuga de gas.
Unos 12 residentes siguen en paradero desconocido, y no se descarta que en el momento del drama hubiera visitantes en el edificio.
“Tenemos tres fallecidos confirmados y podemos decir que esperamos encontrar más”, dijo el jefe de la policía de la isla, Robin Smith, en una rueda de prensa.
Según él, la explosión se debió “probablemente” a una fuga de gas.
Con ayuda de perros y expertos del sur de Inglaterra, los bomberos de Jersey pasaron toda la noche buscando entre los escombros.
Al igual que muchos otros vecinos, la ministra principal de este territorio británico, Kristina Moore, dijo que se despertó de noche al oír el estruendo de la explosión.
“Estamos absolutamente devastados y muy preocupados por la gente afectada y por quienes perdieron su vida”, declaró Moore a la BBC.
El proveedor de gas de Jersey, Island Energy, dijo estar trabajando con los bomberos para saber qué sucedió.