De acuerdo con las informaciones, agentes inmigratorios llegaron a la sede de la firma panadera Aryzta AG en Chicago y exigieron la documentacíón respectiva de los trabajadores.
“La compañía no fue capaz de verificar que los trabajadores tenían los documentos necesarios para trabajar legalmente en Estados Unidos, alegando que estos fueron contratados por una agencia de empleo”, informa, en tanto, La Prensa de Honduras.
De acuerdo con las fuentes, la redada en esa panadería es uno de los mayores operativos contra la inmigración que el gobierno de Donald Trump ha efectuado.
Estas redadas pueden influir directamente en el aumento a los precios al consumidor de EE. UU., al verse mermado el aporte de la población inmigrante que labora en miles de empresas en ese país.
Hace un año, Donald Trump prometió que deportaría o encarcelaría a millones de indocumentados apenas asumiera el gobierno de Estados Unidos, al mismo tiempo que daba a conocer sus primeros nombramientos estratégicos en el Gabinete para cumplir sus promesas de campaña.
El número de inmigrantes indocumentados en Estados Unidos se estima en 11 millones, la mayoría mexicanos, centroamericanos y sudamericanos instalados desde hace años en el país.
