El asesinato masivo ocurrió en la populosa colonia 1 de Diciembre, según un comunicado anterior de la policía.
Los atacantes penetraron sorpresivamente al negocio y dispararon a mansalva contra más de 30 clientes que allí departían. Después huyeron rápidamente en un automóvil que los aguardaba.
Familiares de los fallecidos, con ayuda de la policía, cerraron las calles aledañas por temor a que los asesinos regresaran.
Siete hombres murieron en el Hospital Escuela Universitario de la capital, dijo a The Associated Press el vocero de esa institución, Miguel Osorio.
Las edades de las víctimas mortales oscilan entre los 19 y 30 años. Uno de los fallecidos era un joven que conducía una mototaxi y estaba estacionado a unos 50 metros del billar, aseguró la policía.
La matanza se produjo un año después que un tiroteo similar en otro billar cercano dejara un saldo de cinco muertos y tres heridos.
Estadísticas oficiales indican que en 2015 hubo 360 muertes en 98 homicidios múltiples o masacres en el país, ligeramente por debajo de los 100 sucesos de esta clase reportados en 2014.
Ese tipo de acciones prevalece en las regiones de Honduras con mayor concentración poblacional donde predominan el tráfico ilegal de drogas y armas y las extorsiones.
La policía indicó que el sitio donde ocurrió el tiroteo es controlado por la pandilla Barrio 18.
En Honduras operan desde 1986 las peligrosas pandillas La 18 y Mara Salvatrucha. El crimen organizado emplea a los miembros de las pandillas como sicarios y en el cobro de extorsiones.
Cada día mueren al menos 14 personas en Honduras, donde la impunidad es superior al 91% y los hechos no son aclarados por las autoridades. Cada año además hay un promedio de 5.000 muertos a causa de la violencia callejera.