“Tras el análisis del primer registrador hemos concluido que no hubo explosión a bordo. Pero, además de una explosión, pudo haber una acción mecánica de cualquier tipo. No necesariamente un atentado terrorista debe estar relacionado con una explosión” , dijo el militar.
Pese a todo, la versión del atentado terrorista no es una de las prioritarias, precisó.
“Cada accidente aéreo tiene muchos aspectos. No se puede hablar de una, ni siquiera de dos causas de este suceso. Las causas se sitúan tanto en el ámbito del factor humano, como en las condiciones técnicas y las condiciones externas” , apuntó Bainétov.
Al comienzo de la investigación sobre las circunstancias del siniestro la comisión gubernamental manejaba más de 15 versiones de lo sucedido, pero tras un primer análisis de las dos “cajas negras” , las posibilidades se han reducido a siete, incluido el atentado terrorista.
Aunque las primeras conclusiones oficiales sobre las causas de la tragedia no se darán a conocer al menos hasta dentro de un mes- como han anunciado hoy miembros de la comisión de investigación- sí se ha confirmado que hubo un fallo técnico instantes antes de que el avión se precipitara al mar.
“Es obvio que hubo un fallo técnico, pero sus causas deben ser aclaradas por los expertos” que trabajan con las “cajas negras” y con los restos de la aeronave recuperados del agua, aseguró el ministro de Transportes ruso, Maxim Sokolov.
Bainétov precisó que habrá que esperar “al menos 30 días” para poder contar con las “conclusiones definitivas” sobre las circunstancias del accidente.
“Funcionamiento anormal” del aparato
El siniestro del avión militar ruso Tu-154 en el mar Negro con 92 personas a bordo el pasado fin de semana se debió a un “funcionamiento anormal” del aparato, dijo este jueves el ministro ruso de Transportes, Maxim Sokolov.
“Está claro que hubo un funcionamiento anormal […] Los expertos deberán aclarar las razones y ese es el motivo por el que se ha creado una comisión especial” , dijo en una conferencia de prensa.
Según el ministro, las primeras conclusiones sobre las causas de la catástrofe se darán a conocer en enero. Los vuelos de todos los Tupolev 154 han quedado suspendidos a la espera de esas conclusiones.
Hipótesis de un atentado
Serguei Bainetov, director del servicio de seguridad aérea de la aviación rusa, indicó por su parte que “no hubo explosión” a bordo del aparato, sin descartar la hipótesis de un atentado.
“Un acto terrorista no tiene por que ser una explosión, no excluimos” esa hipótesis, afirmó, recalcando un atentado podía ser causado por una “acción mecánica” .
Según las autoridades, los investigadores finalizaron “la fase principal” de la operación de búsqueda en el mar Negro, tras haber encontrado “todo lo relacionado con el siniestro del avión” .
Sólo quedan algunas pequeñas partes del aparato y fragmentos de cuerpo por recolectar, indicaron.
“La zona de la catástrofe ha sido totalmente inspeccionada. Diecinueve cuerpos, 230 fragmentos de cuerpos, 13 grandes piezas del avión y cerca dedos mil fragmentos han sido remontados a la superficie hasta el momento” , precisó Sokolov.
Labores de busqueda
“El avión casi se descompuso por completo al impactar contra la superficie del agua y luego el fondo del mar Negro, lo cual complicó las labores de búsqueda” , añadió.
Las dos cajas negras del aparato fueron encontradas el martes y el miércoles, un hallazgo fundamental para determinar las causas del siniestro que dejó 92 muertos, entre ellos más de 60 integrantes del Coro del Ejército Rojo.
El Tu-154 militar ruso se estrelló en aguas del mar Negro instantes después de despegar del aeropuerto de la ciudad balneario de Sochi, donde hizo una breve escala para repostar combustible.
A bordo de la aeronave siniestrada viajaban 64 miembros de la agrupación Alexándrov, 9 periodistas, 8 militares, 8 tripulantes, dos funcionarios y la famosa doctora Elizaveta Glinka, presidenta de una fundación humanitaria.
Los artistas militares viajaban a Siria para ofrecer un concierto de Año Nuevo en la base área de Jemeimim, donde Rusia tiene desplegada una agrupación de aviones de guerra.