Según el diplomático ruso, la “prioridad inmediata es evitar el peligro de guerra”, por lo que urgió a Estados Unidos y sus aliados a no utilizar la fuerza contra Siria.
Preguntado si esa guerra a la que se refiriere podría enfrentar a Rusia y EE.UU., Nebenzia recalcó que es algo que no puede descartarse dado que hay fuerzas rusas en Siria y existe un gran riesgo de escalada.
“Ellos saben que estamos allí. Me gustaría que hubiese diálogo por los canales apropiados para evitar cualquier acontecimiento peligroso”, añadió.
“La situación es muy peligrosa y lo hemos dejado muy claro”, dijo al término de una reunión a puerta cerrada del Consejo de Seguridad de la ONU.
La cita fue convocada por Bolivia para discutir las amenazas lanzadas por el presidente estadounidense, Donald Trump, que ayer avisó a Rusia de que se prepare para una actuación con misiles contra Siria, en represalia por el supuesto ataque químico del pasado sábado en la ciudad de Duma.
EE.UU. acusa al régimen sirio, aliado de Moscú, de ser responsable de ese uso de sustancias prohibidas.
Nebenzia defendió hoy que la mera amenaza de un ataque por parte estadounidense es una “clara violación” de la Carta de Naciones Unidas.
“Esperamos que no haya un punto de no retorno, que Estados Unidos y sus aliados se abstengan de una acción militar contra un Estado soberano”, apuntó el embajador ruso.
Nebenzia dijo que su país ha pedido una nueva reunión del Consejo de Seguridad, en este caso en formato abierto, para analizar con el secretario general de la ONU, António Guterres, las tensiones en torno a Siria.
Según dijo, el encuentro todavía no tiene fecha, pero confió en que sea “pronto”.