Hizo hincapié en que dimitía pese a que “no soy culpable de ninguno de los cargos que se me imputan” y porque “no puedo permitir que un director de la policía esté siendo investigado y puesta en duda su honorabilidad” .
El alto oficial ha sido sindicado de haber acosado sexualmente hace varios años a uno de sus subalternos. El jefe policial siempre ha rechazado esa denuncia.
Trabajó 38 años en la Policía y la dirigió en los últimos dos años y medio.
En diciembre, un columnista de la revista bogotana “Semana” escribió un artículo sobre el aparente incremento injustificado del patrimonio del jefe policial. El general se defendió argumentando que su patrimonio es público y fruto del trabajo en la Policía durante tres décadas.
A inicios del mismo mes la Fiscalía General anunció la apertura de una investigación para tratar de establecer quiénes eran los responsables de “seguimientos e interceptaciones ilegales a la periodista Vicky Dávila” , quien desde los medios locales ha encabezado las denuncias contra altos oficiales de la policía. Dávila es la directora de noticias de la emisora La FM.
Según la fiscalía, las amenazas contra Dávila “pueden guardar relación con una serie de notas y denuncias periodísticas que involucran presuntas irregularidades dentro de la policía nacional” .
El 9 de diciembre el presidente Santos creó una comisión para que investigue las denuncias contra la cúpula de la policía por presunta corrupción, acoso sexual y espionaje a periodistas.
El mandatario dijo en su momento que la comisión — integrada por dos exministros de Defensa — tendría un plazo de 90 días para presentar su informe y recomendaciones. Hasta ahora no se conocen los resultados de dichas pesquisas.
La víspera, uno de los viceministros del Interior también renunció luego de que medios locales hicieran pública una conversación suya con un capitán en la que habla de prácticas homosexuales en la Policía.
El gobierno aún no se ha pronunciado sobre el caso.