Estados Unidos conmemora este viernes el Día de la Independencia, adelantándose en un día a la tradicional fecha del 4 de julio. La festividad suele recordarse con actos públicos en todas las ciudades del país para contemplar los fuegos artificiales.
Cuomo dijo que, de acuerdo con disposiciones adoptadas por las autoridades federales, ha dado órdenes para que se refuerce la vigilancia en los eventos que se llevarán a cabo este fin de semana.
También pidió a los habitantes del estado que extremen sus precauciones y alerten a las autoridades sobre cualquier amenaza potencial.
En el comunicado, Cuomo incluyó consejos dados en ocasiones previas por las autoridades para reconocer actos sospechosos, cómo se debe reaccionar y cómo se debe informar a las autoridades.
Estas advertencias se suman a otras medidas dadas a conocer el miércoles por la Policía de la Ciudad de Nueva York, la más poblada del país, que incluyen el registro de vehículos sospechosos, la revisión de huéspedes en hoteles y el monitoreo de redes sociales.
Las autoridades de Nueva York, sin embargo, han afirmado que no existen “amenazas creíbles” que indiquen que para estas fechas hay riesgo de atentados, aunque están preocupadas por posibles actos de un “lobo solitario” que simpatice con el terrorismo islámico.
Siempre que hay algún acto terrorista de gravedad en cualquier parte del mundo las autoridades de Nueva York suelen fijar disposiciones especiales de alerta ante el temor de que la ciudad se convierta también en objetivo.
La mayor concentración de público en Nueva York para estas fechas se llevará a cabo el sábado por la noche, cuando los habitantes de la ciudad se concentren cerca del East River para contemplar los fuegos artificiales por el Día de la Independencia.
Se espera que para ese momento se lancen a la calle unos tres millones de personas. Las márgenes de East River y de los barrios vecinos serán patrullados por unos siete mil agentes policiales.
La seguridad ha sido reforzada teniendo en cuenta los últimos atentados terroristas de grupos radicales en Túnez, Francia y Kuwait, con decenas de muertos, y el carácter patriótico de la fecha que se celebra el 4 de julio.