El proyecto del presidente Andrés Manuel López Obrador fue aprobado por la amplia mayoría oficialista, tras lo cual deberán ser discutidos varios de sus artículos antes de que el trámite continúe en el Senado.
La reforma al Poder Judicial pretende elegir por voto popular a jueces y magistrados y ministros de la Suprema Corte. El dictamen con proyecto de decreto por el que se reforman, adicionan y derogan diversas disposiciones de la Constitución mexicana en materia de reforma del Poder Judicial fue aprobado con 359 votos a favor del Movimiento Regeneración Nacional (Morena) y sus aliados, los Partidos del Trabajo (PT) y Verde Ecologista (PVEM), y 135 en contra de la oposición.
La maratónica sesión se lleva a cabo desde la tarde del martes 3 de septiembre en un polideportivo de Ciudad de México, ya que el edificio legislativo fue bloqueado por parte de trabajadores del Organismo Judicial que están en huelga contra la reforma desde hace dos semanas.
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La propuesta es rechazada por la oposición y genera tensiones con Estados Unidos, que amenaza la relación en el marco del Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC) y sería un riesgo para la democracia mexicana. A criterio del Gobierno estadounidense el narcotráfico podría aprovecharse de la elección popular para manipular jueces.
Con la reforma se busca que los jueces y magistrados sean elegidos de listas de candidatos propuestos por el poder Ejecutivo, Legislativo y Judicial. Los detractores aseguran que un mecanismo así podría erosionar la independencia judicial.
Enfrentamiento con el poder judicial
López Obrador acusa a jueces y magistrados de favorecer la corrupción, crímenes de cuello blanco y a grupos delictivos. Sin embargo, la principal destinataria de sus críticas es la Suprema Corte de Justicia de México que ha frenado total o parcialmente reformas suyas en los sectores energéticos y de seguridad.
El presidente mexicano a los jueces del máximo tribunal de haberse convertido en aliados de la oposición y de tener ingresos por encima de lo legal. Durante la discusión de la reforma, los legisladores oficialistas hicieron eco de la postura del presidente.
Ricardo Monreal, coordinador de los congresistas de Morena, dijo que el Legislativo no puede someterse a ningún juez o autoridad distinta.
“México está construyendo un sistema de justicia que será un ejemplo en el mundo”, añadió.
Morena y sus aliados, que arrasaron en las elecciones generales del pasado 2 de junio, suman dos tercios de los 500 escaños que se requieren en la Cámara de Diputados para aprobar reformas constitucionales sin negociar con la oposición.
La iniciativa, presentada en febrero del 2024, también tendrá que ser votada en el Senado, donde al oficialismo le falta solamente un voto para reunir la llamada mayoría calificada.
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Preocupación de EE. UU.
El embajador estadounidense en México, Ken Salazar, reiteró sus críticas a la reforma al acusar que pone en riesgo la relación bilateral.
“Si no se hace de manera bien, puede traer muchísimo daño en la relación. Hay muchísima preocupación”, dijo el diplomático a periodistas.
Canadá también ha advertido sobre riesgos para la seguridad jurídica de las inversiones.
La consultora británica Capital Economics explica que los reparos son compartidos y los inversionistas enfocados en la moneda, los bonos y las acciones mexicanas temen que la reforma pueda causar una politización del Poder Judicial.
Demos significa “pueblo”. Este sustantivo, junto con krátos, que puede traducirse como “poder”, componen el nombre de la democracia: el poder del pueblo.
— Dra. Claudia Sheinbaum (@Claudiashein) September 4, 2024
Abraham Lincoln lo definió así :"La democracia es el gobierno del pueblo, por el pueblo y para el pueblo".
A la presidenta…
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López Obrador ha calificado esas expresiones como “injerencistas” mientras la presidenta electa, Claudia Sheinbaum, quien asumirá el 1 de octubre, rechazó las críticas a la iniciativa.
“La reforma al poder judicial no afecta ni nuestras relaciones comerciales, ni las inversiones privadas nacionales, ni extranjeras. Por el contrario, habrá más y mejor Estado de derecho y más democracia para todas y todos”, dijo Sheinbaum en la red social X (antes Twitter).