“Ese no es el camino, el de la amenaza, el del sometimiento, el de la invasión, ¿Qué se creen estos mequetrefes, intervencionistas, prepotentes? A México se le respeta”, dijo el mandatario en su habitual rueda de prensa matutina.
El presidente respondió por segundo día consecutivo a las propuestas de congresistas de ese partido de utilizar a militares estadounidenses para combatir a los cárteles.
López Obrador ya había calificado esa iniciativa de “prepotente” y de ser una falta de respeto a la soberanía de México.
Congresistas republicanos también han presentado un proyecto de ley para designar como “terroristas” a los grupos que trafican fentanilo, un opiáceo sintético 50 veces más potente que la heroína.
Una de las iniciativas, presentada por los senadores Roger Marshall y Rick Scott en reacción a la muerte de dos estadounidenses secuestrados en la ciudad fronteriza de Matamoros la semana pasada, apunta específicamente a los cárteles mexicanos del Golfo, Jalisco Nueva Generación, Sinaloa y del Noreste.
López Obrador dijo que en lo que va de su gobierno, que inició en diciembre de 2018, se han incautado seis toneladas de fentanilo, y detalló que cada kilogramo de esa droga equivale a un millón de dosis.
“Pero esto en realidad no les importa a algunos legisladores republicanos, sino lo que quieren es sacar raja política electoral”, denunció.
Añadió que su gobierno pedirá a los mexicanos que viven en Estados Unidos que “no voten por ellos”.
López Obrador anunció que el canciller Marcelo Ebrard se reunirá el lunes 13 de marzo en Washington con los cónsules de México en Estados Unidos para difundir ese trabajo y para “que se les responda a estos legisladores republicanos de manera directa”.
El fentanilo es foco de preocupación en Estados Unidos ante las decenas de miles de muertes que ha causado por sobredosis en ese país, cuya producción y tráfico controlan los cárteles mexicanos con precursores químicos provenientes de China.
La DEA ha exhortado a México a “hacer más” contra los cárteles que controlan el tráfico de fentanilo, a menudo mezclado con drogas legales sin que el consumidor lo sepa.
El jueves 9 de marzo, el canciller Ebrard dijo que México y Estados Unidos lanzarán una campaña para prevenir el consumo de esa droga, tras una audiencia con López Obrador y la asesora presidencial de Seguridad Interior estadounidense, Elizabeth Sherwood-Randall.
López Obrador dijo que en la reunión con la funcionaria se trató también el tráfico de armas desde Estados Unidos, un tema que México ha señalado como una de las causas de la vorágine de violencia que ha dejado unos 340 mil homicidios desde 2006, cuando el gobierno de ese entonces lanzó un polémico operativo militar antidrogas.