Existe interés por este fenómeno por la comunidad de observadores del cielo. Castro explica que la ventaja es que desde ya se puede ver, de 18 a 19.30 horas aproximadamente está visible, en el Oeste estos puntos brillantes se observan. El más brillante es Júpiter y el de menos intensidad Saturno. El 21 de diciembre será el punto más cercano en que se verán a simple vista. Quienes tienen telescopio incluso podrán ver los anillos de Saturno y los satélites de Júpiter en el mismo campo visual.
El fenómeno se producirá en el próximo solsticio de invierno. Se ha dicho que una de las posibles explicaciones de la famosa Estrella de Belén que anunció el nacimiento de Jesús es esta conjunción extrema de planetas, “es una oportunidad de observarlo y formarnos un criterio al respecto”, agrega Castro.
La Asociación Astronómica de España ha descrito que La Estrella de Belén es uno de los grandes misterios que ha envuelto el nacimiento de Cristo, pero pudo ser una invención de San Mateo, un hecho sobrenatural o una visión astronómica. A la fecha se tienen tres teorías que tratan de explicar qué sucedió.
En general, la descripción de este momento considerado histórico se describe en los versos en el Evangelio de Mateo, de la Biblia. “¿Dónde está el Rey de los judíos que ha nacido? Porque vimos su estrella en el oriente y hemos venido a adorarle”, Mateo 2:2.
¿Una supernova o un cometa?
¿Se trataría de una supernova? La Administración Nacional de Aeronáutica y el Espacio, Nasa describe que una supernova es la explosión más grande que los humanos han visto. Cada explosión es la explosión extremadamente brillante y súper poderosa de una estrella. Las supernovas son espectaculares; algunas incluso se pueden ver de día.
Los astrónomos creen que unos dos o tres supernovas ocurren cada siglo en galaxias como nuestra propia Vía Láctea. Porque el universo contiene muchas galaxias, los astrónomos observar unos pocos cientos de supernovas por año fuera de nuestra galaxia.
Según datos, la última que se observó a simple vista para esta galaxia fue en 1604. Según datos de astrónomos antiguos de la cultura china, persas o caldeos no se tienen registros de una supernova en el tiempo de Jesús. Así que esto ha sido descartado.
Tampoco se ha considerado un cometa, porque esto no era asociado con el nacimiento de un mesías o un rey sino con cuestiones fatalistas.
Conjunción de planetas
Miguel Gilarte Fernández, presidente de la Asociación Astronómica de España ha escrito recientemente en sus redes sociales que el acontecimiento que se espera el próximo 21 de diciembre es impresionante. “…El acercamiento máximo de los dos planetas… tan próximos que se verá como una sola estrella, será lo más brillante del cielo. Este acontecimiento, tuvo lugar en el año 1,226 y no se volverá a repetir hasta el 2,400. Yo creo que este fenómeno planetario alumbró el nacimiento de Cristo en el año 7 a. C.”, detalló.
En otro artículo escrito por el conocedor se explica que en el año 7 a.C. ocurrió una conjunción planetaria (acercamiento aparente en el cielo de dos o más planetas), nada habitual, Júpiter se paseó casi justamente por delante de Saturno, hasta en tres ocasiones en poco tiempo, en la constelación de Piscis.
Los magos interpretarían este hecho como: un gran rey (Júpiter) de Justicia (Saturno) nace entre los judíos (Piscis). Piscis, representa al pueblo de Israel. Se esperaba la llegada del Mesías, según los profetas, y estos signos indicaban que el hecho estaba ocurriendo, al menos para los magos de oriente.
Hace la referencia que entonces se hablaba de la Estrella de Belén, pero por aquél entonces, no había diferencia entre las estrellas y los planetas, los planetas simplemente eran estrellas errantes, estrellas en movimiento, mientras que el resto, las estrellas de verdad, permanecían fijas en el cielo.
“Después de oír al rey Herodes, ellos (los magos) partieron. La estrella que habían visto en el este, iba delante ellos, hasta que se detuvo en el lugar donde estaba el niño”, Mateo 2:9. El planeta Júpiter se desplazó lentamente hacia el este en el 7 a.C., iba delante de los magos, hasta que se detuvo y al poco comenzó su camino hacia el oeste.
Gilarte también comenta que en 1925 se encontró una tablilla de arcilla a 100 km de Babilonia, con caracteres cuneiformes, que habla de la conjunción triple entre Júpiter y Saturno, así que fue visible en toda aquella zona.
La tablilla está en el museo estatal de Berlín. Los magos conocían que un acontecimiento astronómico se repetiría por tres veces durante varios meses. Probablemente partieron de oriente cuando el fenómeno comenzó y llegaron a Belén, cuando éste concluyó. El viaje que realizaron duró varios meses. Hubo otras conjunciones en los años 5, 3 y 2 a.C.
El periodista científico, José Manuel Nieves intenta aclarar con datos rigurosos en el Programa Átomos y Bits TV, que fue lo que guió a los Reyes Magos hasta el portal de Belén, en la que se pone en duda la fecha exacta de la Navidad cristiana. “Lo que hayan visto los Reyes Magos tuvo que ser entre el año 7 y 2 a. C.”, describe el experto.
El profesor de la Universidad de Navarra Pablo M. Edo, también describe estas tres teorías que podrían explicar qué se vivió durante la época del nacimiento de Jesús.
*Artículo actualizado el 17 de diciembre de 2020.
