Según Gonzalo Jiménez-Moreno, investigador del departamento de Estratigrafía y Paleontología de la Universidad de Granada y uno de los firmantes del estudio, durante este período se alcanzaron temperaturas similares a las de las últimas décadas.
Este hecho, explica, indica que el aumento que se está observando en la temperatura en la actualidad predice más y más fuertes incendios naturales en los bosques de esta región, lo que podría ser aplicado a otras regiones del mundo como esta.
Los investigadores son capaces de averiguar cómo varía la frecuencia de incendios en una región en el pasado a través del estudio de la cantidad de carbones microscópicos que encuentran en los sedimentos de los lagos.
“Cuando se produce un incendio, se emiten muchos carbones en forma de humo a la atmósfera, y estas partículas caen y se depositan en las cuencas sedimentarias en un radio de unos kilómetros alrededor del foco del incendio” , según Jiménez-Moreno.
“Al estudiar la cantidad de carbones por centímetro cúbico de sedimentos, vemos que había épocas en las que los incendios eran muy abundantes y otras no tanto” , agrega.
De esta forma comprobaron que la cantidad de incendios naturales aumenta cuando aumentan las temperaturas, algo que ocurrió durante el periodo cálido medieval y que, dice, está ocurriendo también en la actualidad“.
Aunque el estudio se llevó a cabo en las Montañas Rocosas, el científico señala que estos resultados pueden ser ” perfectamente extrapolados” a otras zonas del planeta como Europa, que desde hace décadas registra un aumento de temperaturas similar al que originaron aquellos grandes incendios en el período cálido medieval (alrededor del año 800-1300 d. C.) .