Calderón señaló que las votaciones manuales mediante boletas son un sistema apto para que ocurran “irregularidades”.
“Tienen que intervenir miembros de juntas receptoras de votos, provocando un alto manoseo de las mismas durante el proceso de votación, escrutinio y traslado”, aseguró Calderón.
De acuerdo con el asesor, de ser posible la transición a un sistema de votos electrónicos, desaparecerían “el 80% de las anomalías que se presentaron” durante estos comicios, como el desalojo de fiscales opositores de los centros de votaciones, el voto múltiple y la falta de entrega de copias de actas de escrutinio a los responsables de las juntas receptoras de voto.
Esta debilidad en el sistema, según Calderón, se reflejó en el porcentaje de abstencionismo, que ellos calculan es del “65 y 70 por ciento”.
En las recientes elecciones municipales en Nicaragua, el gobernante Frente Sandinista de Liberación Nacional (FSLN) ganó en 135 de los 153 ayuntamientos disputados en los comicios municipales del domingo en Nicaragua, incluida Managua, con 98.76 por ciento de las mesas escrutadas, según el tercer informe del Consejo Supremo Electoral (CSE).
El Partido Liberal Constitucionalista (PLC), la principal fuerza de oposición en la Asamblea Nacional (parlamento), se impuso en 11 municipios; el partido Ciudadanos por la Libertad (CxL) en otros seis, y uno la Alianza Liberal Nicaragüense (ALN), según el CSE.
El árbitro electoral aclaró que sólo faltan por escrutar 163 juntas receptoras de votos, de un total de 13 mil 69 juntas que fueron habilitadas, principalmente las ubicadas en los lugares recónditos del país.
Estas elecciones municipales, en las que se eligieron a 153 alcaldes, con sus vicealcaldes y 6 mil 88 concejales propietarios y suplentes, fueron vigiladas por 60 observadores de una misión de la Organización de Estados Americanos (OEA).
