La agencia sanitaria de las Naciones Unidas actualizó las recomendaciones sobre la prevención de la transmisión sexual del virus y especificó que esta directriz debe aplicarse a todos los retornados, presenten síntomas o no.
Con respecto a las personas que viven en lugares donde hay transmisión activa del virus, la OMS recomienda que tanto los hombres como las mujeres sexualmente activos “sean aconsejados correctamente y que se les ofrezcan toda la gama de métodos anticonceptivos disponibles para que sean capaces de tomar una decisión informada sobre si quieren engendrar un bebé y cuándo” .
El objetivo es que todas las personas sean conscientes de la posibilidad de engendrar un bebé que presente alteraciones neuronales con efectos devastadores para su desarrollo.
La actual epidemia, que ya afecta a más de 60 países, se originó en Brasil a finales del 2014 y es ahí donde se detectaron los primeros casos de malformaciones congénitas, especialmente microcefalia en recién nacidos.
Esa malformación se ha detectado en otros países, pero no con la incidencia que en Brasil.
La semana recién pasada, el Comité de Emergencias de la OMS decidió que la epidemia del virus del Zika sigue constituyendo una emergencia sanitaria de alcance internacional, dada su continua expansión geográfica y las amplias lagunas sobre sus efectos neurológicos.
En junio, la organización recomendó que solo aquellos hombres con síntomas usaran condones o se abstuvieran de tener relaciones sexuales durante ocho semanas tras regresar de áreas con epidemia.
La enfermedad es transmitida mayormente a través de la picadura de mosquitos.
Se ha demostrado que una cepa del zika que ahora circula en Latinoamérica causa anormalidades cerebrales y craneales en recién nacidos. La OMS dice que los hombres y mujeres que viven en esas zonas deben “tomar una decisión informada sobre si y cuándo embarazarse” .