El fenómeno se sitúa aproximadamente a 255 kilómetros al suroeste de Cabo Corrientes, en el estado de Jalisco, y a 510 kilómetros al sur-sureste de Cabo San Lucas, en el noroccidental estado de Baja California Sur.
El sistema tiene vientos máximos sostenidos de 65 kilómetros por hora (km/h), rachas de 85 km/h, y se desplaza hacia el noroeste a 11 km/h.
Olaf ocasiona lluvias puntuales intensas (de 75 a 150 milímetros (mm)) en los estados de Jalisco y Nayarit; muy fuertes (de 50 a 75 mm) en Michoacán, y fuertes (de 25 a 50 mm) en Baja California Sur, Colima y Sinaloa.
Lea también
La tormenta también provoca rachas de viento de 60 a 70 km/h y oleaje de 2 a 4 metros de altura en las costas de Baja California Sur, Colima, Jalisco, Michoacán y Nayarit.
“El Servicio Meteorológico Nacional (SMN) de la Comisión Nacional del Agua (Conagua), en coordinación con el Centro Nacional de Huracanes de Miami, mantiene zona de vigilancia por efectos de tormenta tropical desde Los Barriles hasta Santa Fe, ambas localidades de Baja California Sur”, apuntó el texto.
Las precipitaciones podrían generar deslaves, incremento en los niveles de ríos y arroyos, y desbordamientos e inundaciones en zonas bajas, apuntó el SMN, que pidió a la ciudadanía seguir las recomendaciones de Protección Civil.
“A la navegación marítima en las inmediaciones del sistema se le hace un llamado a extremar precauciones por vientos y oleaje frente a las costas de los estados mencionados”, agregó.
Le puede interesar: Atentados 11 de septiembre: las torturas y los otros “secretos escondidos” que contendrían los documentos del ataque terrorista en EE. UU.
Según el pronóstico, el ciclón se moverá en paralelo a las costas mexicanas como tormenta tropical durante varios días y sin llegar a tocar tierra, pero ocasionando lluvias.
Hasta el momento en el océano Pacífico se han formado los ciclones Andrés, Blanca, Carlos, Dolores, Enrique, Felicia, Guillermo, Hilda, Ignacio, Jimena, Kevin, Linda, Marty, Nora y Olaf.
Las torrenciales lluvias generadas por el huracán Grace provocaron la muerte de al menos once personas, ocho en el oriental estado de Veracruz y tres en el céntrico estado de Puebla, además de severas inundaciones y daños en Veracruz, estado que se asienta en el Golfo de México.
Mientras que Nora dejó un menor muerto y al menos siete desaparecidos -seis de ellos pescadores-, y Dolores, que tocó tierra el pasado 19 de junio e impactó especialmente en los estados de Colima y Michoacán y dejó tres muertos por tormentas eléctricas.