El portavoz Josh Earnest dijo que en los próximos días la Casa Blanca dará más detalles del viaje del mandatario.
El miércoles Dylann Roof, de 21 años, entró a una reunión de lectura bíblica en la iglesia y, tras permanecer una hora entre los feligreses, repentinamente abrió fuego sobre ellos.
Roof fue inculpado el viernes por los nueve homicidios y por “porte de arma de fuego en el marco de un crimen violento”. La justicia federal lo investiga por “terrorismo interno” y como autor de un crimen de odio.
“No estamos curados del racismo”
En tanto horas antes del anuncio, el mandatario estadounidense ofreció una entrevista radial en donde reconoció que “no estamos curados del racismo”, evocando la persistencia de la segregación en la sociedad estadounidense.
“No se trata solamente de no decir negro en público porque es mala educación, no es por eso que se constata si el racismo continúa existiendo” explicó el primer presidente afrodescendiente de Estados Unidos en una entrevista concedida al programa radial “WTF with Marc Maron”, difundido en la mañana del lunes.
“No es solamente una cuestión de discriminación evidente. Las sociedades no borran completamente, de un día para otro lo que pasó 200 o 300 años antes”, afirmó el mandatario.
“La herencia de la esclavitud, de (las leyes de segregación racial propuestas por) Jim Crow, de la discriminación en casi todas las instancias de nuestra vida, eso tiene un impacto durable y sigue formando parte de nuestro ADN”, advirtió.
Polémica por bandera confederada
La gobernadora de Carolina del Sur (EE.UU.), la republicana Nikki Haley, pidió, por su parte, la retirada de la bandera confederada de los jardines del Parlamento estatal tras reavivarse la polémica sobre ese polémico símbolo con el tiroteo en la iglesia de la comunidad negra de Charleston la semana pasada.
“No vamos a permitir que esto nos divida. (…) Como estado tenemos que ser la casa de todos, no vamos a declarar aquí un vencedor o un perdedor”, dijo Haley en una rueda de prensa.
La bandera identifica a los estados sureños que combatieron en la Guerra Civil contra la abolición de la esclavitud, de hecho en días recientes se vio a al asesino confeso Dylann Roof, con una bandera en la mano mientras sostiene una pistola.
El Parlamento del estado debatirá en las próximas semanas la retirada de la bandera confederada de su sede, después de que hace 15 años, tras una protesta de 46.000 personas, decidiera trasladar la controvertida enseña de la cúpula del Capitolio a los jardines.