La policía malasia no ha señalado directamente a Corea del Norte como la responsable de la muerte de Kim Jong Nam, pero ya arrestó a un norcoreano que trabajaba en una compañía malasia, así como a otras tres personas del sureste asiático. Además está en busca de varios norcoreanos más.
La Comisión de Juristas Coreanos, un organismo legal afiliado al Parlamento de Corea del Norte, dijo el jueves en un comunicado que la investigación de Malasia carece de imparcialidad y está influenciada por el gobierno de Corea del Sur, que culpa a Pyongyang del fallecimiento.
Corea del Norte no ha reconocido que la víctima sea Kim Jong Nam. En el comunicado del jueves se describe al fallecido únicamente como un ciudadano norcoreano poseedor de un pasaporte diplomático.
Denunció que Corea del Sur ha “creado un escándalo” y conspiró para responsabilizar al gobierno norcoreano por el fallecimiento.
“La mayor responsabilidad de su muerte yace en el gobierno de Malasia, dado que el ciudadano de la República Popular Democrática de Corea murió en su territorio”, se acusa en el comunicado.
Las dos mujeres sospechosas de envenenar de muerte a Kim Jong Nam fueron entrenadas para cubrir sus manos con sustancias químicas tóxicas y después frotarlas sobre el rostro de la víctima, afirmó el miércoles la policía malasia.
Ésta señaló que aún se desconoce la sustancia utilizada, pero que fue lo suficientemente potente como para matar a Kim antes de que pudiera llegar al hospital.